Lo que iba a ser un rutinario anuncio de resultados trimestrales se ha convertido a mediados de agosto, cuando todo el mundo todavía está de vacaciones, en un bombazo. HP quiere abordar “la transformación”, según reza en la nota de prensa emitida por la compañía. De alguna manera, HP quiere dejar de ser la HP de siempre, para parecerse quizá a IBM o para seguir su propio camino. No es la primera vez que lo intenta, y probablemente no será la última. El objetivo de Leo Apotheker, CEO de la compañía y verdadero muñidor del plan, es centrarse en los negocios de mayor valor y acelerar la estrategia para dar servicios cloud, software y soluciones totales dirigidas a la empresa. Las compras multimillonarias de firmas como 3PAR o Autonomy así lo muestran. Desde su llegada a la dirección de HP, Apotheker, que procede de SAP, ha dejado claro que el futuro de la compañía está en el ámbito de los sistemas empresariales complejos, y no tanto en el consumo, a la baja en los últimos meses, o en la microinformática. El plan anunciado la semana pasada, y aquí está lo más sorprendente, pasa por deshacerse de alguna manera del negocio de ordenadores personales, el más castigado, todo hay que decirlo, por los bajos márgenes, por la debilidad de la demanda de los hogares y por la competencia feroz de las tabletas. HP, que no dice exactamente qué hará con el Personal Systems Group (PSG), baraja varias opciones, como la venta total o parcial a través de un spin-off. Sin embargo, y a la vista de la reacción de los inversores (la acción se desplomó un 20% al conocerse el plan), el mercado no está muy convencido. Yo también creo que hay muchos peros que poner. En primer lugar, algunos piensan que con este movimiento HP quiere emular a IBM, que hace unos años vendió su línea de PC a la china Lenovo, pero hay diferencias. Mientras que IBM había dejado morir el negocio del hardware, a favor de los servicios, HP tiene un catálogo de producto impresionante y es la marca de referencia. No hay que olvidar que, tras la compra de Compaq, HP se consolidó como la primera marca del mundo del PC y ahí sigue, muy por delante de Dell, Lenovo o Acer. En el segundo trimestre de este año, copaba el ránking de fabricantes en todo el mundo, en EMEA y en España. A escala local ha aprovechado el desplome de Acer en los últimos meses para ganar cuota de mercado en un momento ciertamente complicado. Además, en términos de facturación, las ventas de sistemas personales no son residuales y representan un 16% del total de la multinacional. Por otra parte, la rentabilidad de PSG, de casi el 6%, triplica la media del sector. Hacer un anuncio de este tipo y abrir un periodo de consultas (desde la firma aseguran que puede durar entre 12 y 18 meses) puede producir también una espantada de los clientes en busca de otros fabricantes que garanticen la continuidad de las líneas y del negocio. PSG cuenta con mucha tecnología, patentes y soluciones de gestión que sus clientes siempre han valorado y que, de producirse una compra, se pueden quedar por el camino.
Los inversores tampoco han visto con buenos ojos la inesperada cancelación del TouchPad, la tableta con la que HP iba a retar al iPad. Aunque la compañía ha dicho que la decisión no supone el final de webOS, sí pone en cuestión esta línea de desarrollo, que se había iniciado con la compra de Palm por más de 1.000 millones de dólares. En este aspecto, creo que la decisión de HP es más acertada. HP iba a llegar muy tarde a un negocio, el de las tabletas, donde Apple, con su iPad y su tienda de aplicaciones a rebosar, y Google, con Android, ya le sacaban una ventaja casi irrecuperable. En cualquier caso, Apotheker y su equipo, en tela de juicio por tantos giros inesperados, deberán trabajar duro en los próximos meses para explicar sus decisiones y recuperar así la confianza del planeta tecnológico.
Juan Cabrera
Juan Cabrera tiene más de 20 años de especialización en el sector tecnológico y sobre todo en el canal de distribución. También ha colaborado con otros medios y promociona siempre que puede la buena literatura, la música y la vida saludable.