A finales de esta semana, el viernes 6, abre sus puertas la feria de informática y electrónica de consumo más grande de Europa. Se trata del IFA de Berlín, un evento masivo (el año pasado congregó a 1.200 expositores que se repartieron por más de 20 pabellones) para el que los principales fabricantes reservan las novedades que marcarán tendencia en el último tramo del año.
Samsung volverá a ser protagonista. Si el año pasado lanzó toda una hornada de tabletas e híbridos para Windows 8, así como la segunda generación de su smartphone de grandes dimensiones Note, en esta ocasión los focos se los llevará su teléfono inteligente Galaxy Gear, que no será flexible, pero que se postula como un complemento interesante para los portadores de un teléfono con Android. También es posible que veamos la tercera generación del Galaxy Note, así como nuevas pantallas 4K.
Sony intentará también acaparar atención con un reloj inteligente (en realidad la segunda versión de uno que desveló ya en 2012). Además de su smartswatch, Sony también tiene previsto el lanzamiento del móvil XperiaZ1, totalmente sumergible.
LG por el momento ya ha dicho que va a presentar bases de sonido para colocar debajo del televisor y mejorar la experiencia del cine en casa. También enseñará nuevos reproductores inteligentes de Blu-ray y altavoces portátiles.
Toshiba, por su parte, presentará en el día previo a la inauguración una nueva tableta de 8 pulgadas con Windows 8.1, ultraligeros de alto rendimiento y altavoces portátiles Bluetooth con batería. También se verán en el stand del fabricante japonés cámaras diseñadas para captar la vida en movimiento, pensadas principalmente para deportistas.
Panasonic también ha adelantado que el concepto smart se extenderá a todos sus productos, que ganarán en conectividad y estarán vinculados a servicios en la nube. Asimismo, la compañía hará énfasis en la eficiencia energética.
Por su parte, en el espacio de Microsoft, los asistentes podrán tomar un primer contacto con dispositivos equipados con Windows 8.1, la primera actualización sería del sistema operativo. Además, también podrán conocer los nuevos servicios de la firma de Redmond, así como impresoras 3D gestionadas con Windows.
Es previsible también que HTC muestre su One Max, un híbrido de tableta y teléfono dotado de una pantalla de 5,9 pulgadas y gestionado por Android 4.3. Es posible que este dispositivo lleve en sus entrañas un procesador Snapdragon 800, 2 GB de RAM y 32 GB de almacenamiento.
Por último, el día de la inauguración de la feria para el gran público, el viernes, está previsto que Alan Mulally, presidente y CEO del gigante automovilístico Ford, ofrezca una charla sobre cómo la tecnología permite una circulación más segura, más sencilla y cómoda, y por supuesto, más conectada. Además, el directivo presentará un nuevo concepto de vehículo en el que se basarán futuros desarrollos de la marca. Como se ve, nadie (o casi nadie) quiere perderse el evento berlinés.
