A la vuelta del año 2000, la filial española del mayorista Ingram Micro consolidaba un sistema único en la corporación consistente en crear unidades de negocio sin incrementar directamente sus recursos. Primero firmo con Areté para externalizar la venta de servidores (HP) y sistemas de almacenamiento, y luego, a finales de 2001, hizo lo propio con Albora para la comercialización de herramientas de Internet, seguridad o virtualización.
El modelo era el siguiente: mientras que Ingram Micro era quien firmaba efectivamente los contratos con los proveedores y se hacía cargo de la parte logística y financiera, estas empresas, lideradas por empresarios locales, se ocupaban de todo lo demás (preventa, formación, planes de negocio, soporte…) y pasaban posteriormente la factura a Ingram, que, de esta manera, podía apostar por nuevos negocios, pero manteniendo a raya sus costes fijos.
Pues bien, ahora Ingram rompe parcialmente este esquema con la compra de Albora Soluciones, un especialista con marcas de referencia en su catálogo como Citrix, Oracle, Sonicwall o Sophos. A través de esta operación, Ingram hace clara su apuesta por el boyante negocio de la virtualización de servidores y escritorios, así como por el middleware y la seguridad de los sistemas corporativos. Aunque no se han desvelado detalles de la inversión realizada por Ingram para hacerse con todos los activos de Albora, fuentes de esta última aseguran que la compañía mantendrá su marca y que el equipo directivo al completo seguirá al frente de la firma de valor. Las mismas fuentes desconocen si esta operación se enmarca en una de más amplio calado que incluiría la adquisición de Areté, la unidad de negocio especializada en la venta de servidores y almacenamiento.
El presidente de Ingram Micro EMEA, Alain Maquet, ha declarado que “Albora está muy bien posicionada en el mercado español y tiene unos resultados económicos muy satisfactorios, así como una fuerte relación con clientes y fabricantes”. Por su parte, Jaime Soler, director general de Marketing y Ventas de Ingram Micro España, recuerda que, desde la creación de Albora en 2001, “ambas compañías han disfrutado de una estrecha colaboración y un buen entendimiento”.
“Albora”, añade Soler, “se caracteriza por su excelente relación con sus clientes y fabricantes, ofreciendo como valor añadido todos los servicios alrededor de la venta de soluciones tecnológicas. Sus clientes seguirán disfrutando del mismo nivel de servicio, calidad y atención a los que Albora los tiene acostumbrados. Este acuerdo, simplemente, mejorara esta relación. Con esta adquisición reforzaremos nuestro posicionamiento dentro de la distribución que consideramos clave en el futuro del sector“.
Por su parte, Martí Figols, el director general de Albora y el portavoz del triunvirato de directivos locales que ha comandado la firma en los últimos tiempos, “este acuerdo, gracias a la solidez de Ingram Micro, permite a nuestro equipo seguir mejorando nuestro servicio a los clientes, permitiéndonos trabajar en la misma línea de siempre, pero más reforzada ya que revierte en más medios que focalizaremos, como siempre, en generar nuevas oportunidades de negocio para nuestros partners y fabricantes”. Figols también señala que la integración total en Ingram le permitirá aprovechar sinergias con otras divisiones. No obstante, asegura que en el día a día los cambios serán “inapreciables”.
La operación no es una apuesta aislada en la estrategia de Ingram Micro en la zona EMEA. El mayorista adquirió recientemente la firma CCD en el Reino Unido y está dispuesto a engrosar su negocio de valor con otras adquisiciones en la región.
