A finales de octubre Windows 8 llegará al mercado, aunque la versión para OEM está lista desde la primera semana de agosto, el mismo mes en el que se abrieron las puertas a las empresas para empezar a hacer la migración de su parque de Windows XP o Windows 7. Las expectativas de ventas con las que se lanza el nuevo sistema operativo de la factoría de Redmond son muy altas, al menos para el propio fabricante. Durante la celebración de la Partner Conference este verano, en Toronto, Steve Ballmer declaró estar convencido de que supondrá un hito en la historia de la compañía, en línea con el que supuso hace 17 años Windows 95. Las previsiones que barajan consultoras como IDC parecen confirmar estos buenos augurios. “El mercado total de licencias de Microsoft que se van a vender en 2013 a escala mundial será de 116 millones en consumo y de 142 millones en el entorno corporate, lo que supone un crecimiento del 15% y del 13%, respectivamente”, señala Rafael Achaerandio, director de análisis de IDC España. Según este directivo, desde el periodo 2008-2009 las ventas por nuevas licencias no habían crecido tanto en las cifras de la corporación, “con Windows 8, la multinacional volverá a tasas de crecimiento más razonables de las que habían disfrutado en los últimos años”. En su opinión, se trata de una apuesta muy seria por parte de la organización de Bill Gates, una baza en la que se está jugando mucho.
Sin embargo, estos datos hacen referencia al impacto del lanzamiento en el mundo pero, ¿qué ocurrirá en España? Lamentablemente las cosas no irán tan bien. Y es que la industria del PC no levanta cabeza en nuestro país. Achaerandio asegura que durante el próximo ejercicio se comercializarán 286.000 unidades menos, lo que supone una caída mayor de la registrada en 2012 en comparación con 2011. No obstante, no parece que se llegue al casi 34% de descenso que tuvo el pasado año respecto a los números obtenidos en 2010. Eso sí, de acuerdo con las estimaciones de esta firma de investigación, el decrecimiento en el primer semestre se situará en el 19,6%. Dichos pronósticos, revisados a la baja en agosto, indican que la peor parte se la llevará consumo mientras que en el entorno empresarial la bajada no será tan acusada. Sea como fuere, el deprimido negocio local podría recuperarse en 2014-2015. Por el momento, la subida del IVA y la persistente crisis económica pesan más que los avances tecnológicos que están revitalizando el sector en otras regiones. La llegada de este sistema operativo y el vasto paquete de hardware que lo acompañará (Ultrabooks, tabletas, híbridos, portátiles…), no conseguirán sujetar las ventas ni recuperar el nivel de gasto de otras épocas pero impedirán que la sangría sea mayor. De ahí que la pregunta que deberíamos hacernos sería la siguiente: “¿Cómo se comportaría el mercado español sin Windows 8?”
Pues muchísimo peor. Nadie duda de las novedades que trae consigo este anuncio y del efecto positivo que tendrá en los negocios, aunque este impulso no sea suficiente para salvar los números en nuestro país. “Por la experiencia que tenemos en MCR de pasados lanzamientos de Microsoft, sabemos que la introducción de un nuevo sistema operativo siempre supone un incremento de las ventas”, declara Guillermo Echeverría, director de producto Microsoft en MCR. No tan claro lo ve Luis Salinas, responsable del área de Software de Tech Data España que, aunque destaca que Windows 8 cuenta con muchas prestaciones que los usuarios estaban esperando desde hace tiempo, “por lo que hay que esperar que su llegada tenga un impacto significativo”, por otro lado, reconoce que hay que tener en cuenta que la crisis actual está contrayendo la demanda. Ni Agustín Alarcón, director general de Diode España, que aunque ya no son mayoristas de Microsoft mantienen un contrato como OEM local: “A pesar de que todo el mundo habla maravillas del nuevo Windows 8 y después del sabor de boca que ha dejado Windows 7 como producto realmente bueno, esta nueva versión llega en un mal momento para la economía española y le va a costar conseguir muchas alegrías en las compras”.
Rápido en consumo, menos lento en empresa
Parece ser que la nueva criatura va despegar despacito y contará con casi un trimestre de rodaje por lo que lo más probable es que hasta inicios de 2013 no se vea un auténtico despegue. Eso en consumo -donde prácticamente toda la oferta disponible estará basada en Windows 8 y responderá a dos temas relevantes: gestión táctil y entrada en un segmento en auge hoy en día, el de las tabletas-, ya que en empresa –como ocurre siempre- la velocidad de adopción será más lenta, puesto que nos referimos a un cliente que necesita testear la solución, contrastarla para saber que va a funcionar sin problemas y verificar temas de seguridad o compatibilidades, por ejemplo. Como explica Jorge Borges, director de marketing de Toshiba para Iberia, el licenciamiento es diferente, se dilata el tiempo de decisión y elección del producto. Además, el comportamiento difiere si hablamos de gran cuenta o de pyme, en este último caso, la adopción puede ser similar a consumo, inmediata. En este sentido, Borges recuerda un factor importante a tener en cuenta en la llegada del sistema operativo a las organizaciones: “En 2013/2014 Microsoft va a dejar de dar soporte a Windows XP, programa que a día de hoy sigue ostentando una gran cuota en España pues el 40% de los equipos en empresa siguen llevando XP”. De ahí que considere este proceso como una medida muy interesante para dinamizar el mercado e incentivar el upgrade.
Desde Tech Data, por su parte, aluden a la enorme crisis de confianza tanto del ciudadano como de la pequeña y mediana empresa, pero admiten que al nueva versión hace posible “dar una solución a las nuevas tendencias de consumerización y cloud y lo hará con todas las garantías de seguridad para el usuario empresarial como el particular. Esto permitirá que las empresas adopten más rápidamente Windows 8”. A esta ecuación Echeverría, de MCR, añade el hecho de que su predecesor, Windows 7, haya sido un programa muy estable. Pero precisamente por este hecho, el director general de Diode piensa que va a costar más la entrada de este sistema operativo en el entorno corporativo, “el éxito de Windows 7 puede ser un hándicap para Windows 8”, explica. Mientras que considera que en consumo, donde Windows apenas está presente y parte desde cero, “cualquier crecimiento será muy llamativo”, a lo que hay que unir el gran boom del uso de las tabletas, una gran oportunidad para el mercado de consumo.
Más servicios para el canal
Windows 8 permitirá ofrecer a la red de distribución los mismos servicios que ha dado siempre con anteriores productos de la multinacional. A saber: implantaciones, migraciones, configuraciones a medida, labores de intermediación… en definitiva, todo el proceso de renovación del parque instalado. Pero, además, el nuevo gestor abre una ventana al cloud computing, lo que amplía el abanico de oportunidades para el canal, como la posibilidad de brindar seguridad y gestión remota, atendiendo, de esta manera, a un hecho cada vez más presente en las organizaciones: la existencia y utilización de multitud de dispositivos con acceso a los contenidos y recursos de la empresa. “Los profesionales del canal que quieran ofrecer a sus clientes cualquier tipo de servicios avanzados en la nube para acceder desde cualquier tipo de dispositivo móvil pueden basar sus desarrollos en un único sistema operativo, evitando tener que compilar los programas varias veces según la plataforma, con el consiguiente ahorro de costes y tiempo y la minimización de posibles errores”, puntualiza al respecto Guillermo Echeverría de MCR.
Otro punto importante radica en extenso catálogo de soluciones que acompañan al lanzamiento. “Es evidente que Windows 8 abre nuevas oportunidades al mercado de distribución por la gran y nueva oferta de dispositivos que hay y habrá en el mercado”, especifica Luis Salinas, de Tech Data. Opinión que comparten los propios proveedores de hardware: “2013 será un buen año para el canal debido a los cambios que se están produciendo ahora mismo. El mercado profesional está más dinámico que el consumo y Windows 8 ayudará a acelerar este proceso”, indica Borges, de Toshiba, que argumenta sus declaraciones aludiendo a la amplia oferta de productos –para todos los gustos y públicos- que se están presentando con el reciente sistema operativo de Microsoft. También desde Dell aseguran: “Windows 8 está mostrando unos resultados prometedores en las pruebas que Dell está realizando tanto en las tabletas como en otros factores de movilidad. Vemos mucho interés por la tableta tanto en el mercado empresarial como de los consumidores y vamos a seguir ofreciendo las mejores soluciones para todos nuestros clientes. La consumerización de las TI es una tendencia que nos ha demostrado que nuestros clientes empresariales cada vez más están evaluando más la posibilidad de “traer su propio dispositivo” (BYOD) que incluye modelos de ordenadores portátiles, smartphones y tabletas, debido a la fuerte demanda de los empleados”.
Lo que le puede interesar al cliente
Windows 8 supone una ruptura con todo lo anterior y ahí precisamente radica su fortaleza. Entre los aspectos que más podrían interesar al cliente a decantarse por este producto estarían:
– Multidispositivo. Una sola plataforma, la misma experiencia para el cliente independientemente del dispositivo que esté utilizando (ya sea tableta, sobremesa o portátil)
– Integración con dispositivos móviles
– Tecnología táctil, abriendo sus posibilidades a tabletas y productos híbridos (Ultrabook y tablet en uno)
– Integración de las tabletas con aplicaciones estandarizadas y habituales de Microsoft (Exchange, Office, etc)
– Metro, nueva interfaz de Windows 8 que emplea losetas (tiles), iconos activos que permiten interactuar con las aplicaciones, los servicios online y los componentes del sistema de manera unificada
– Mejora la interacción con el usuario
– Seguridad incorporada. Repara procesos de boots, detecta virus en dispositivos USB, mayor nivel de protección, contraseñas basadas en fotografías, herramienta de creación de copias de seguridad cronológicas…
– Facilidad de uso
– Remodelación del Administrador del tareas o el Explorador de ficheros
– Movilidad
– Servicios en la nube
– Eficiencia del kernel o núcleo del sistema (más rápido y ligero que el de Windows 7)
– Incorpora Hyper-V, su propia solución de virtualización
Windows 8 en la balanza
Desde el punto de vista de novedades tecnológicas, Windows 8 tiene muchos puntos a favor, sin embargo, la debilitada economía de nuestro país hace equilibrar la balanza hacia el lado negativo.
A favor
– Se trata de un producto totalmente nuevo, rediseñado desde cero y para todo tipo de dispositivos
– Su lanzamiento viene acompañado de una batería de hardware extensa
– Microsoft dejará de dar soporte a Windows XP en 2014
– Boom actual de las tabletas, soluciones de movilidad y el fenómeno BYOD
– Buenas noticias de ventas de nuevas licencias en el mundo
– Introducción en el universo de la computación en la nube
En contra
– El consumo está muy deprimido, la subida del IVA y el aumento del paro debilitan la demanda. Crisis de confianza del ciudadano y de la pyme
– La empresa está contenta con Windows 7, ¿para qué cambiar?
– Las perspectivas del mercado local de PC no son muy halagüeñas. Se prevé su recuperación en 2014-2015
