En un mundo donde la computación y los servicios se concentran en los centros de datos de los grandes proveedores de nube pública (sobre todo AWS y Microsoft), fabricantes de infraestructura como HPE han tenido en los últimos años que adaptarse para ofrecer alternativas híbridas que combinen los despliegues on-premise de toda la vida y las nuevas modalidades de servicio, y le eviten de paso al cliente el temido vendor lock-in, el cerrojazo que supone para una empresa depender de un proveedor de nube y los costes añadidos que eso tiene.
Esta apuesta se ha materializado en GreenLake, plataforma de tecnología como servicio lanzada en 2018 y que el año que viene debería, según los planes de HPE, aglutinar cualquier producto (de computación, almacenamiento, red, comunicaciones…) que comercializa la compañía. En la primera rueda de prensa que HPE organiza en España en casi dos años (desde el inicio de la pandemia el proveedor no se reunía con los medios de este país), José María de la Torre, presidente de la filial, analizó la situación de GreenLake y la conveniencia que tiene para los clientes, sobre todo frente a la nube pública.
Para De la Torre, además de evitar silos de información y lock-ins y situaciones de dependencia, GreenLake tiene una clara ventaja económica, puesto que, según sus cálculos, yendo a nubes híbridas los clientes pueden ahorrar hasta un 30% de los costes de operación de sus infraestructuras. En este sentido, Antonio Neri, el CEO de HPE, ha afirmado que “ejecutar cargas de trabajo on-premise puede ser hasta un 50% más barato que moverlas a una nube pública”.
Antonio Neri, el CEO de HPE, ha afirmado que “ejecutar cargas de trabajo on-premise puede ser hasta un 50% más barato que moverlas a una nube pública”
Además, José María de la Torre señaló la conveniencia de apostar por una plataforma que también sirve para gestionar la información que está más allá de los centros de datos tradicionales, y que se ubica en el edge o extremo (en sensores, servidores de campo, proveedores de servicios…), y que ya supone el 50% de todos los datos empresariales.
GreenLake todavía es una parte residual del negocio de HPE, pero es el futuro. Supone algo más de 3.000 millones de dólares anuales en ingresos (entre un 10% y un 15% del total). Sin embargo, la plataforma como servicio crece a ritmos de más del 40%, mientras que el negocio tradicional avanza un 3%. La compañía ha confirmado que a nivel mundial ya cuenta con más de 1.200 clientes enganchados de alguna manera a la plataforma y De la Torre concedió que en España ya hay un número a tener en cuenta, aunque no precisó más. En cualquier caso, dominarán los grises en el futuro de HPE. Es decir, según el primer ejecutivo de la compañía en España, el negocio on-premise de HPE se mantendrá “durante mucho tiempo” y a largo plazo la marca va a atender a los clientes en todos los escenarios.
GreenLake todavía es una parte residual del negocio de HPE, pero es el futuro. Crece a un ritmo superior al 40%
Además, el directivo reiteró la intención de la multinacional de tener todas las tecnologías de su catálogo disponibles en formato as-a-service durante el año 2022. Y aseguró que la multinacional trabaja para integrar en GreenLake los productos las últimas adquisiciones. En cualquier caso, dijo que GreenLake “no tiene competencia, por prestaciones, en el mercado”, en referencia velada a los modelos as-a-service que están poniendo en marcha competidores como Dell (Apex) y Lenovo (TrueScale). Asimismo, José María de la Torre adelantó que este año fiscal que empieza el 1 de noviembre, HPE trabajará para atraer al modelo GreenLake al canal tradicional de la compañía, ya que en el pasado la firma puso foco sobre todo en los service providers.
