El gasto mundial en TI alcanzará los 3,5 billones de dólares en 2015, un 5,5% menos que en el ejercicio precedente, según vaticina Gartner. Según los analistas de la consultora, la fuerte apreciación del dólar es clave en esta tendencia descendente puesto que en moneda constante el mercado podría experimentar un crecimiento del 2,5%. Las previsiones realizadas por la misma Gartner en el mes de abril hablaban de un descenso del 1,3% que se traducía en un aumento del 3,1% en moneda constante.
Para John-David Lovelock, vicepresidente de Gartner asegura que la alta cotización del dólar tiene otros efectos secundarios como el incremento de los precios de los equipos para proteger costes y márgenes que en algunos casos retrasan las decisiones de compra de las empresas y usuarios. Los servicios de comunicaciones continúan representando la mayor partida del gasto total con 1,5 billones de dólares, aunque también será el más afectado por el descenso de los cinco sectores considerados.
En el segmento de los dispositivos, los móviles continuarán liderando este segmento con crecimientos significativos en el entorno Apple, especialmente en Chine, donde se mantiene un agresivo ritmo de compra por parte de empresas y usuarios. No obstante, el negocio de los smartphones comienza a frenar, mientras que las ventas de PC y tabletas continuarán estando por debajo de lo previsto. El posible incremento del 10% en el precio medio de los equipos va a afectar a las decisiones de compra de forma significativa. Los excesivos niveles de inventario, sobre todo en en Europa occidental, podrían reducirse en la segunda mitad del año coincidiendo con el lanzamiento de Windows 10.
El negocio del centro de datos, almacenamiento y soluciones de red también se frenará un poco como consecuencia de la apreciación del dólar, aunque las ventas de servidores mejorarán gracias a la progresiva sustitución de los mainframes. El gasto del software para empresa también descenderá un 1,2% con un total de 654.000 millones. Los analistas de Gartner dicen que los fabricantes de software intentarán no elevar los precios porque el software como servicio les permitirá elevar su cuota de mercado, aunque no su rentabilidad.
El gasto en servicios IT también se reducirá un 4,3% y tan sólo se producirá un reducido aumento del gasto en consultoría. “La caída de precios y la apuesta por el tecnología como servicios servicios enmascara el incremento de la actividad”.
