Hace unas semanas, la consultora IDC señalaba que el CIO, el jefe máximo tecnológico en las grandes empresas y en organismos públicos de cierta entidad, no estaba aprovechando la crisis para vender la tecnología como una vía para el recorte de costes y para superar el mal momento. Ahora Alexis Brabant, director general del grupo que reúne a los mayoristas Distrilogie y Mambo, también reclama un perfil más activo de estos directivos: ”El CIO ha de participar e implicarse en la estrategia de la empresa junto al CEO. En la mayoría de los casos, el directivo TI se preocupa por las tecnologías y la securización de la organización, mientras el CEO trata de mejorar la competitividad. La convergencia entre estos dos talentos es fundamental para hacer crecer la compañía”.
Para Brabant, el gran reto que el año 2010 tiene pendiente es lograr modernizar el tejido empresarial español y, para lograrlo, las TI son las herramientas más adecuadas. “A pesar de la situación económica, se sigue innovando en tecnología, pero esos avances han de adaptarse a los servicios que demanda la empresa para ser más competitiva y reducir gastos. También es cierto que donde se está concentrando la inversión en estos momentos es en el área de seguridad -que ha tenido un crecimiento superior a dos dígitos el pasado año- y otras nuevas tecnologías como DLP o soluciones basadas en IP”, señala.