CCS Agresso va a plantar batalla, y dura, a sus directos rivales que trabajan en el escenario del software de gestión y comercializan soluciones para la pequeña empresa. La compañía, que goza de un importante reconocimiento de marca y prestigio en el mercado de la mediana empresa con la solución Ekon, ha acelerado su estrategia para ganar presencia en el segmento de las empresas con menos de 100 usuarios y facturaciones entre los 6 y los 8 millones de euros.
“Queremos pasar de cero a cien y conseguir que nuestros partners generen el 50% de los ingresos en el plazo de los próximos años”, asegura al respecto Alicia Cru, flamante directora de canal de la firma y con una dilatada trayectoria en puestos similares. La apuesta es muy ambiciosa teniendo en cuenta que hasta la fecha la facturación del canal representaba un testimonial porcentaje del 5% sobre el volumen global de ingresos.
El reto es todavía más importante para la filial española que será la encargada de poner en marcha un programa de canal dirigido a reclutar 43 distribuidores en el primer año de andadura, y a más de 200 a lo largo de los cinco años siguientes. “Actualmente tenemos 4.500 clientes y queremos llegar a un universo de 15.000 empresas en el plazo del próximo lustro”.
La solución Ready, que se presentará en el mercado el próximo 17 de septiembre y se ha diseñado con la plataforma de desarrollo Karat, servirá a los partners para llegar a las pymes y ofrecerles servicios de valor asociados. “Queremos que los distribuidores vendan licencias, pero también soporte y servicios para ganar en rentabilidad”. Conscientes de que muchos de ellos, debido a sus dimensiones y reducida estructura, no tendrán capacidad para ofrecer dichos servicios, CCS Agresso ha llegado a un acuerdo con la firma especializada Innova, con la que podrán contratar dicho soporte.
Bajo el lema “Habla pyme, piensa en pyme” CCS Agresso desplegará también una agresiva campaña de marketing y publicidad en colaboración con su mayorista GTI–el único designado para trabajar en este escenario – a los que transmitirá las virtudes de comercializar soluciones para la pyme.
Tras la adquisición de CCS –la histórica Centro de Cálculo de Sabadell, dirigida por José Antonio Salanova- por parte de la holandesa Agresso, la firma con sede en 21 países se planteó la posibilidad de llegar a la pequeña, a raíz de las nuevas posibilidades que han ido surgiendo. “Todos los fabricantes quieren llegar a este nuevo mercado, que requiere contar con soluciones y funcionalidades adecuadas a sus necesidades y con precios adaptados a sus bolsillos”, explica Cru al respecto.