Microsoft acaba de presentar para el mercado español la primera generación de su propuesta Software+Servicios, que estará disponible en abril y que tiene como principal objetivo “aprovechar la máxima potencia de la máquina con la máxima potencia de la red, sin necesidad de renunciar a ambos mundos”, según Vicente Sánchez, director de Operaciones y Marketing de la compañía. Así, la nueva estrategia, plenamente operativa desde otoño pasado en Estados Unidos, pasa por albergar el software en sus centros de datos ubicados en San Antonio, Chicago y Dublín, y que han supuesto una inversión de alrededor de 2.500 millones de dólares, para ofrecerlo en forma de servicio. Con este enfoque, Microsoft comercializará sus herramientas de productividad y colaboración, entre las que se incluyen Exchange Online, SharePoint Online, Office Communications Online y Office Live Meeting, bajo el nombre de Business Productivity Online (BPOs).
Con esta nueva suite se pretende “que la corporación elija cómo, dónde y cuándo utilizar el software de acuerdo con sus requerimientos en cada situación, con la posibilidad de compartir información, iniciativas y actividades con otras personas y organizaciones”, asegura Sánchez. Y todo ello es perfectamente compatible con la opción tradicional de utilizar los servidores propios para instalar las aplicaciones. Este giro del gigante de Redmond permitirá abordar nuevos mercados “a los que no se llegaba con el modelo de negocio tradicional”, reconoce el director de Operaciones, y “ayuda a sacar el mayor valor de las TI y a ahorrar costes innecesarios, especialmente en estos momentos en que se ven presionadas por hacer más con menos”, confirma.
Paralelamente, también se ha anunciado la disponibilidad de la plataforma Business Productivity Online Deskless Worker, que incluye Exchange Online Deskless Worker y SharePoint Online Deskless Worker. Es una oferta de bajo coste diseñada para usuarios que no tienen acceso a mensajería y capacidades de colaboración de forma habitual, y que se cobrará a razón de 2,56 euros por usuario y mes.
Según las estimaciones de Microsoft, estas soluciones implicarán un ahorro de costes de entre un 10 y un 15 por ciento, y presentan como principales ventajas “conseguir una experiencia integrada, facilitando la movilidad y la coexistencia de lo propio con lo compartido”, explicó por su parte Victoria Samohano, jefa de Producto de Comunicaciones Unificadas y BPOS. Pero además se ha tenido muy en cuenta la seguridad, “un aspecto clave para poder acceder de manera fiable a todas las aplicaciones, gracias a los nueve niveles de protección que tiene”.