Por Carlos Teno
El Consumer Electronic Show (CES) de este año no pasará a la historia como uno de los más importantes. La feria deja unsabor agridulce que, de no ser por apenas cinco novedades, habría pasado a la historia más por sus gadgets que por su innovación. El balance final son 130.000 asistentes (10.000 menos que el año pasado) y 2.700 expositores frente a los 3.000 del CES 2008.
La feria de informática de consumo más importante del mundo nos tenía acostumbrados a una avalancha de lanzamientos, tanto por su cantidad como por su magnitud. Este año no ha sido así. El evento comenzó fuerte con el anuncio por parte del Steve Ballmer de la disponibilidad de la beta de Windows 7, pero, a medida que transcurrían los días, la feria no consiguió mantener el nivel.
Aún así, se presentaron novedades importantes como Pre, el nuevo terminal con pantalla táctil de Palm, que aspira a competir con el iPhone de Apple. Además, Skype, la compañía de llamadas baratas por Internet, ha traído su versión para móviles y Sony ha mostrado un ultraportátil que pesa 630 gramos. Por otra parte, Samsung ha presentado Show, un móvil que incorpora un proyector para reproducir vídeos e imágenes en una pared.
