Cataluña, Madrid y Andalucía son algunas de las regiones que más utilizan la factura electrónica en la Unión Europea. La implantación de esta innovación supondría para las empresas españolas un ahorro anual cuanto menos de 450 millones de euros al año como resultado combinado del ahorro en medios físicos, como el papel impreso, y de la optimización de los procesos de negocio.
En concreto, en el I encuentro nacional de expertos en factura electrónica, XBRL y contratación pública celebrado en Sevilla, Stefan Engel-Flechsig, líder del grupo jurídico del grupo de expertos de la Unión Europea sobre factura electrónica y el responsable de la primera legislación mundial de comercio electrónico, destacó que las empresas andaluzas y la administración pública de esta autonomía han situado a este comunidad entre las primeras de la Unión Europea en adoptar la facturación electrónica.
En este sentido, Andalucía supone el 9% de las implantaciones de facturación electrónica en España, donde las empresas y las administraciones emiten un total 4.500 millones de facturas al año de forma convencional, con un gasto total de 9.000 millones de hojas de papel. Se estima que el proceso de emisión de una factura en formato papel tiene un coste de 3,50 euros , según los datos manejado por los expertos que han participado en este encuentro, por lo que el gasto anual de enviar y recibir facturas se eleva a 15.000 millones de euros, lo que equivale al 1,5 por ciento del PIB.
Este encuentro fue organizado en Sevilla por la Asociación de Empresarios de Tecnologías de la Información y Comunicaciones de Andalucía (Eticom) y por Sandetel, empresa pública de la Consejería de Innovación, Ciencia y Empresa de la Junta de Andalucía. En esta jornada participaron más de 300 empresarios y representantes de instituciones públicas de toda España, junto a los principales especialistas europeos y nacionales en facturación electrónica.