Por Mayra Martínez
La adquisición de 3Com por parte de Bain Capital Partners, aún sin resolver, continúa trayendo cola. Todo empezó el pasado septiembre cuando 3Com accedía a ser adquirida por la firma de inversión Bain Capital Partners por un montante de 2.200 millones de dólares. La fusión parecía inevitable hasta que meses después, la Agencia de Inversiones Extranjeras estadounidense empezaba a mostrar sus recelos sobre la entrada a escena de la empresa china de comunicaciones, Huawei Technologies, que iba a quedarse con el 16% de la compañía resultante. Hasta el momento Huawei sólo era socio estratégico de 3Com a través de la joint venture con base en Hong Kong en la que ambos participaban desde finales del 2003.
Que Huawei (empresa que ostenta lazos con el gobierno comunista Chino) pasara a ser propietario del consorcio, representaba un problema para la Administración norteamericana. Especialmente por que ésta es, a su vez, un gran cliente de 3Com y la entrada de Huawei significaría que la extranjera tendría acceso a cierta información privilegiada. La fusión empresarial se convertía, por tanto, en un problema de seguridad nacional.
Fue esta circunstancia la que empujó a Bain Capital a dar por finalizado el acuerdo. El 20 de marzo la firma de inversiones lanzaba un comunicado en el que el daba a conocer su decisión de interrumpir la compra. Pero 3Com no se lo iba a poner fácil. Un día después, casi el 70% de los accionistas de la firma votaban a favor de proseguir con el acuerdo de fusión tachando de inválida la decisión de Bain de retirar su oferta de compra. “3Com cree que las razones citadas en la nota de prensa de Bain Capital no son pertinentes para la terminación del acuerdo”, declaró Edgar Masri, presidente y CEO de 3Com.
Con ello la firma ha dado a entender su intención de, al menos, hacer pagar a Bain una multa de 66 millones de dólares por incumplimiento de contrato. La norteamericana, que acaba de presentar unos desastrosos resultados financieros en el tercer trimestre del año fiscal 2008 con unas pérdidas que ascienden a los 7,8 millones de dólares, siente que su imagen y ventas se han visto profundamente afectadas por toda la polémica que ha rodeado el tema de la compra.
