TP-Link ha cerrado los primeros seis meses del año fiscal 2014, que comenzó el pasado mes de enero y que termina el próximo mes de diciembre, con un crecimiento interanual cercano al 44%. Esta tasa de crecimiento está en línea con la registrada por la compañía en el conjunto del año pasado, y con los objetivos marcados para el presente ejercicio. Las cifras, según explica Kevin Wang, country manager de TP-LINK Iberia, “muestran cómo la marca está consolidando su posición de liderazgo en el mercado español y confirman que los esfuerzos e inversiones que estamos realizando van en la correcta dirección”.
En los últimos meses, TP-Link ha reforzado todo su canal retail con la creación de un equipo de cuatro personas que atienden las necesidades de los socios de la marca en las zonas norte, sur, centro, Cataluña y Levante, así como ambos archipiélagos, y la creación de un soporte técnico en español, más próximo al cliente, y formado por profesionales altamente cualificados, que dan respuesta en menos de 48 horas a cualquier petición del usuario.
Este año, además, el fabricante ha inaugurado una segunda oficina en Barcelona con el firme propósito de consolidar su presencia en esta región. Desde esta nueva sede, TP-Link atiende a partners estratégicos que tienen su sede en la Ciudad Condal, mejorando el soporte que se ofrece a los clientes locales, y afianza el negocio en la zona noreste y Andorra.
Además, TP-Link afronta los últimos meses del año dirigiendo sus esfuerzos a dos nuevas áreas de negocio, ISPs y B2B, con el objetivo de incrementar así su presencia en el mercado corporativo, donde todavía tiene un amplio margen de crecimiento. Para ello, el fabricante ha creado un equipo especializado en estos dos sectores que le permitan conseguir rápidamente presencia y posicionarse como una marca de referencia.