La aparición de la fotografía digital asestó un golpe casi mortal a empresas como Kodak, máximo exponente de la industria fotográfica analógica, y que había basado su negocio hasta ese momento en la venta de cámaras y carretes. Una difícil adaptación de la compañía al mundo digital y una política equivocada de diversificación de negocios llevó al fabricante a la bancarrota en enero con un pasivo de 6.750 millones de dólares.
Ahora, tras la venta millonaria de varias patentes y la inyección de liquidez que ha conseguido Kodak, la compañía podría salir a mediados de 2013 de su suspensión de pagos, según ha informado el diario estadounidense Wall Street Journal. La bancarrota en los EEUU (el conocido Capítulo 11 de ley de quiebras estadounidense) no se concibe como en la Europa continental, ni mucho menos como en España, donde en el 80% de los casos es el camino seguro a la liquidación de la compañía. En el país norteamericano la suspensión de pagos es una forma de proteger a las empresas de sus acreedores para que éstas pergeñen un plan de viabilidad y se les da todo tipo de facilidades para continuar con su negocio. En última instancia, y si no queda más remedio, la compañía se liquida, algo que no suele ser del agrado de los acreedores, que prefieren su continuidad, ya que de otra forma no cobrarían parte o la totalidad de sus créditos.
Así, Kopdak podría salir de la bancarrota en 2013 tras conseguir que un grupo de inversores inyecte 843,7 millones de dólares en la firma. Entre estos inversores se encuentran Silver Point Capital LP and Contrarian Capital Management LLC. Además, la compañía llenará sus cuentas con la venta de 1.100 patentes por 525 millones de dólares. La reserva de propiedad sobre sus invenciones es uno de los principales activos de Kodak, que aún tiene mucho que decir en este terreno. El comprador de estas patentes es un consorcio de compañías tecnológicas: Apple, Google, RIM, Facebook, Amazon, Microsoft, Samsung, HTC, Adobe, Fujifilm, Huawei y Suttherfly.
Detrás de la compra de las patentes se encuentra una estrategia para evitar una guerra entre fabricantes de cámaras de fotos digitales y teléfonos inteligentes, los dispositivos del futuro en lo que se refiere a la imagen digital de gran consumo. El paquete de patentes vendido por Kodak es una pequeña porción de todas las licencias que aún conserva la compañía, que aún mantiene en su porfolio cerca de 9.600 patentes.