Oki finaliza 2007 con la renovación casi al completo de su gama de impresoras láser/LED color, conformada por las series C3000, C5000 y C9000. De esta forma, en la primera de ellas ahora tan sólo se ubicará el modelo C3450n, que sustituye a los equipos C3300n y C3400n. Las principales características de esta impresora, que tiene un precio de 354 euros sin IVA y soporta cargas de 35.000 páginas mensuales, se resumen en una velocidad de 16 páginas por minuto (ppm) en color y 20 ppm en monocromo, así como la posibilidad de trabajar con soportes de hasta 120 centímetros de longitud y 203 gramos. Por todo ello, la C3450n está indicada para autónomos y pymes con grupos de impresión de hasta cinco personas. Por lo que respecta a la serie C5000, ha quedado configurada por los modelos C5650, C5750, C5850 y C5950. Los dos primeros están indicados para empresas que imprimen sobre todo en monocromo y que en ocasiones requieren alta calidad a color, mientras que los otros dos están indicados para compañías que soportan altos volúmenes de documentos tanto en color como en monocromo. La nueva gama C5000, con precios entre los 399 y 1.049 euros sin IVA, se caracteriza por un ciclo de 60.000 páginas mensuales y una velocidad de 32 ppm en monocromo y 26 ppm en color, admitiendo grosores de hasta 203 gramos y longitudes de 120 cm. El mercado objetivo de esta serie está formado por empresas con grupos de trabajo de hasta 10 usuarios. En cuanto a la familia C9000, de momento OKI ha mantenido la gama C9800, pero ha renovado la C9600 con el lanzamiento del equipo A3 C9650, disponible en configuraciones entre los 3.100 y los 4.500 euros sin IVA. En principio, esta impresora está orientada a entornos de oficina, aunque el fabricante estima que también encontrará su hueco en el mercado de artes gráficas. No en vano, se trata de una máquina que soporta papel de hasta 300 gramos y que trabaja a una velocidad de hasta 36 ppm en color y 40 ppm en monocromo. Tanto la gama C5000 como la C9000 incluye modelos con disco duro opcional.
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