Ante una multitudinaria audiencia de 600 distribuidores y con una presentación espectacular, Sage España celebró su segundo encuentro del canal en nuestro país. Entre los muchos mensajes transmitidos, Álvaro Ramírez, CEO y consejero delegado de la firma, destacó el interés de Sage por trasladar a sus socios el negocio de nuevas licencias e insistió en la necesidad de que aumenten su retorno de la inversión por usuario (ARPU), como fórmula para obtener mayor rentabilidad. La tercera compañía nacional de software detrás de SAP y Oracle, ya genera el 51% de las ventas a través de su red de colaboradores, compuesta por compañías que comercializan producto en la gran, mediana y pequeña empresa. En un desglose que demuestra el importante papel protagonizado por sus partners, los 3.114 socios certificados en la pequeña organización comercializaron el 50% de las nuevas licencias, mientras que los 130 distribuidores especializados en las medianas compañías vendieron el 38% de las nuevas licencias. Más espectacular resulta la cifra aportada por los 48 partners de valor añadido certificados en la gran empresa que monopolizaron el 67% de las nuevas licencias. Esta división, dirigida por Eufemio Escobar, también ha procedido a integrar los canales de soluciones CRM y ERP bajo un único mando y quiere aumentar el número de integradores para ganar en capilaridad. En el segmento de las pymes, los resellers también contarán con mayores oportunidades de negocio gracias al lanzamiento del contrato Premier, que permite integrar software y servicios y ofrecer mayor rentabilidad al canal. “Aunque sea Sage la que ofrezca los servicios, el distribuidor ya ha ganado más negocio”. La división de la mediana empresa genera el 51% de las ventas, la pequeña el 42% y el 7% restante corresponde a la corporación.
Entre los objetivos a conseguir con su conjunto de socios certificados destaca también el incremento del número de leads y promover el cross-selling, es decir, que todos los colaboradores puedan vender todas las líneas de producto de la compañía, “siempre que cumplan con las reglas establecidas”. Aunque Sage va a promover la consecución de mayor negocio para el canal, tampoco le dolerán prendas con quienes no obtengan los resultados apetecidos. “Si algún distribuidor no alcanza las previsiones, romperemos la relación con él”, asegura Ramírez al respecto. Para el directivo, el principal dinamizador del negocio el próximo año será la entrada en vigor de las normas NIC, que implicará un gasto medio por empresa de 3.000 euros. “Es una oportunidad de negocio histórica”, explica el máximo directivo de la que ya es cuarta filial de Sage a nivel mundial por volumen de negocio.