Tras un año y medio trabajando en el mercado luso, GTI ha decidido dar un paso más en su estrategia de expansión en el país vecino con la apertura de su primera oficina en Portugal. Desde esta delegación, situada en Lisboa y dirigida por Pedro Romao de Almeida, encargado de la gestión comercial del mayorista en Portugal desde enero de 2003,
GTI ofrecerá a los clientes locales los mismos niveles de servicio que desarrolla en España, y lo hará de forma más “directa, eficaz y personal”, según Ignacio Sestafe, director general de la compañía.
No en vano, para los responsables del mayorista el hecho de tener ya presencia física en Portugal significa la consolidación de su negocio en este país y una clara apuesta por brindar más apoyo a los partners lusos. Tanto es así que el mayorista se plantea como objetivo convertirse en referencia para los clientes portugueses mediante la aportación de un alto valor añadido a sus operaciones comerciales. “Estamos aquí para apoyar a los distribuidores portugueses, no solamente con la venta de productos, sino que también pretendemos brindarles nuestro apoyo a través de nuestros conocimientos técnicos que proporcionarán al mercado luso una cada vez mayor calidad, especialización y certificación”, señala Romao de Almeida.
De momento, la oficina física de Lisboa emplea a dos personas, cuyo trabajo está respaldado desde Madrid por toda una serie de recursos financieros, comerciales, logísticos, etc. completamente dedicados al mercado portugués. Este back-office se refuerza con continuos desplazamientos de personal desde Madrid a Lisboa. Además, Florencio Martínez, director de la división de Sistemas Avanzados de GTI y responsable de desarrollo de negocio en Portugal, asegura que las intenciones del mayorista tras esta apertura pasan por incrementar la plantilla física en ese país, según los requerimientos del mercado.
