Hace dos años fue Infinity System quien rompió el mercado de PC poniendo contra las cuerdas a las multinacionales. Pero era de esperar una reacción por parte de las grandes marcas, siempre tan acostumbradas a luchar por el primer puesto del ránking. Hace un año Antonio Papale, director general de Acer, advertía de que su compañía estaba en disposición de disputar el liderazgo en portátiles y estaba también dispuesta a echar el resto para estar entre las tres primeras firmas de PC en el cómputo global (sobremesas, servidores y notebook). Dicho y hecho, la compañía taiwanesa, a la que se acusa desde algunos sectores de haber tirado los precios, acababa 2003 liderando el mercado de portátiles y como número dos en ventas globales, sólo por detrás de HP. Acer va a por todas. Lejos de conformarse con lo conseguido, el fabricante vuelve a repetir éxitos en el primer trimestre de 2004 y anuncia nuevos retos a cumplir a finales de este ejercicio. Además de mantener el liderazgo en portátiles, Papale quiere que este también sea el año del sobremesa y de los servidores, así como escalar posiciones entre los clientes corporativos con el fin de que Acer no sea una marca exclusivamente asociada al consumo. En cifras, la meta pasa por vender 100.000 unidades de desktop este año, lo que según Papale supondrá un crecimiento del 400 por ciento, mientras que en el apartado de los servidores el fabricante aspira a situarse el cuarto o el quinto en el ránking. Además, Antonio Papale se defiende de quienes aseguran que Acer no gana dinero y ha anunciado unos beneficios a escala local de 4 millones de euros después de impuestos en el año natural 2003.
Pero ni lo cosechado ni lo que está aún por recoger habrían sido posible sin la decidida apuesta por el canal. El pasado ejercicio la compañía puso en marcha un programa de certificación de partners que parece haber dado excelentes resultados. No obstante, el fabricante está acometiendo varios cambios con el fin de contar con una red seria y lo más fiel posible. Para empezar, la firma ha decidido recortar el número de socios admitidos en el programa, de forma que serán 200 los puntos de venta certificados como Acer Point, y no 350, así como 70 y no 150 los socios pyme, denominados Acer Active. El objetivo es que ambos canales generen el 20 por ciento de las ventas en 2004. Mientras, el canal corporativo también será cuidadosamente escogido, ya que la firma de hardware tiene grandes esperanzas puestas en la gran cuenta. Los Acer Executive no serán nunca más de 10. Paralelamente, la compañía va a establecer diferentes niveles de asociación dentro de cada uno de los dos primeros grupos. Así, Papale quiere contar con 70 socios Silver, 96 Gold y 34 Platinum en el ámbito de los Acer Point, y 50 distribuidores Active y 20 Select dentro de los Acer Active.
El fabricante no prevé grandes cambios en el apartado mayorista. Tan sólo Caelsa se ha quedado fuera de la red logística, quedando Tech Data, Ingram Micro, Actebis, Diode, ARC y UMD. No obstante, Papale también ha apuntado la posibilidad de llegar a un acuerdo con Investrónica dada la relación existente con IECISA.