Año de pandemia, y año de récords para la industria del PC en España. Según datos del panel de mayoristas de GfK a los que ha tenido acceso CHANNEL PARTNER, el 2020 se salda con algo más de 2.495.000 portátiles comercializados en este país, un 39,7% más que en 2019. El hecho de que millones de trabajadores y estudiantes a partir de marzo hayan tenido que seguir con su actividad desde casa ha disparado las ventas de notebooks.
Y ese buen momento se ha mantenido hasta el final del ejercicio. De hecho, el último trimestre del año se saldó con 946.591 portátiles vendidos, nada menos que un 61,2% más que en el mismo periodo del ejercicio anterior. Por formatos, brillaron sobre todo los equipos ultrafinos (de 18 o menos milímetros de grosor). De este tipo de equipos se vendieron durante 2020 un 137,8% más, hasta totalizar casi 760.000 máquinas. Y sólo en el último trimestre, coincidiendo con las campañas de Black Friday y Navidad, los canales de venta hicieron llegar a los clientes 300.000 de estos portátiles ligeros.
Los ingresos totales que generó el portátil en todo el año ascendieron a 1.232 millones de euros, un 37% más
En cuanto a la facturación que dejaron los portátiles en el mercado español, los datos de crecimiento van en consonancia con los de unidades. Los ingresos totales que generó la comercialización de notebooks en todo el año ascendieron a 1.232 millones de euros, un 37,1% más. En el cuarto trimestre, este formato dejó al canal unos ingresos de 449 millones, un registro un 52,2% al cosechado un año antes.
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Dificultades para el sobremesa
El formato que no brilló tanto en 2020 fue el del sobremesa. Al fin y al cabo, muchas empresas con la Covid-19 se han quedado desiertas o con una asistencia de trabajadores muy reducida, y eso ha repercutido en las compras y renovaciones de estos equipos, más vinculados al puesto fijo en la oficina. Según el panel de mayoristas de GfK, en España se comercializaron durante 2020 1,18 millones de ordenadores de escritorio, un 5,1% menos que en 2019.
En el último trimestre, la caída fue incluso mayor (de un 13,8%). En términos de ingresos, los retrocesos también se notaron. En concreto, en todo el año el desktop dejó al canal 235 millones de euros, un 9,5% menos, mientras que en la recta final del ejercicio generó casi 75 millones, un 6,7% por debajo de 2019. Sólo los all-in-one o todo-en-uno escaparon de este espiral negativa.
Más servidores, pero a menor precio
Donde sí hubo incrementos significativos fue en la partida de servidores. En todo el año se comercializaron casi 51.000 máquinas en el mercado español, un 89,7% más. Sin embargo, en términos de ingresos, el avance sólo fue del 4,4%, hasta llegar a los 56,7 millones de euros. Eso supone que los precios medios de las máquinas cayeron significativamente. Mientras tanto, las estaciones de trabajo sí se resintieron en el año de la pandemia, cayendo un 36,8% en unidades (hasta algo más de 9.000 máquinas), y un 30,3% en ingresos, hasta totalizar 11,2 millones de euros.
