El año pasado, la venta de smartphones en el canal batió récords. Según Context, los teléfonos inteligentes, en otro tiempo un producto controlado casi exclusivamente por las operadoras y sus redes de tiendas gracias a las políticas de subsidio y financiación de terminales, pasaron a convertirse en la segunda línea de negocio del canal informático, sólo por detrás de los portátiles. La proliferación de marcas alternativas a los grandes fabricantes y la reducción en las telecos de las otrora ambiciosas iniciativas para facilitar la adquisición de teléfonos han disparado en los dos últimos años la venta de terminales libres (no asociados a un contrato) por el canal TI y electro.
Como cuenta Antonio Valiente, director de Tech Data Mobile Iberia, los libres no suponían más del 2% del mercado total hace algo más de un lustro, y ahora rondan el 45% de un negocio que el año pasado movió 15 millones y medio de terminales. Herminio Granero, director de la división de Mobility de Ingram Micro, dice que los operadores están inmersos en la “guerra de los servicios” y que para ellos el terminal ha perdido fuerza a la hora de atraer a los clientes.
Además, las telecos, en su opinión, “nunca han sido felices vendiendo hierro”, aunque no tuvieran más remedio que hacerlo. Como consecuencia, el móvil no sólo ha llegado a las tiendas especializadas en telefonía o a los grandes retailers, sino también a las tiendas tradicionales de informática e incluso a las de electrónica de consumo y electrodomésticos, lo que ha dado más protagonismo mayoristas como Ingram Micro, que tienen en catálogo los celulares de marcas como Samsung, LG, Alcatel, BQ, Wiko o Huawei.
El repunte económico y el ansia por renovar aparato desbarataron en 2015 todas las previsiones. Fue un tiempo en que el negocio crecía mes a mes entre un 25 y un 35%, según Valiente. Sin embargo, este año la cosa no está yendo bien. Una tabla muy indicativa de Context dibuja el cambio de tercio. Y es que mientras que en 2015 había meses en que el crecimiento de los smartphones en el canal mayorista rondaba el 90%, en los cuatro primeros meses de este año es un negocio que cae invariablemente, entre un 10 y un 20% si se miran febrero, marzo y abril.
El paisaje que pintan los números de GfK en su estudio de punto de venta es bastante parecido. Entre enero y abril las ventas cayeron en unidades casi un 16%, mientras que en valor cedieron un 6%, sobre todo debido a que los precios medios han subido. Y un matiz: aunque es verdad que las “grandes caídas” se están viendo en el ámbito de las operadoras, el móvil libre también se ha frenado. Los números cantan. La cuestión es ver qué ha pasado.
[La versión completa de este informe está disponible en el número 169 de CHANNEL PARTNER, correspondiente al mes de septiembre, que puedes descargarte pinchando en este link]