A pesar de que el precio de los smartphones ha disminuido un 32,7% en los últimos cinco años, comprar un terminal de alta gama –como un iPhone o un Samsung Galaxy- es un 20% más caro que en 2011. Así lo dice un estudio llevado a cabo por Kelisto.es.
Según la comparadora, los fabricantes de telefonía han ido incrementando el precio de los dispositivos de alta gama con el lanzamiento de cada nuevo modelo mientras que el salario de los consumidores españoles se ha estancado. En concreto, deben pagar hasta 150 euros más que hace un lustro. Esto implica que, en algunos casos, los usuarios deben abonar hasta un 67% de su salario mensual para poder adquirir el iPhone 6S o el Samsung Galays S75. Y hay que tener en cuenta que el sueldo mensual más frecuente en España se sitúa en 1.107 euros.
“El precio de los mejores móviles del mercado se ha disparado en los últimos cinco años. Los fabricantes han aumentado considerablemente los precios mientras que los sueldos no han crecido ni un euro y el precio de los móviles de gama media ha descendido considerablemente. Comprar un iPhone 4s en 2011 costaba 599 euros, mientras que para adquirir el último iPhone 6s Plus se deben desembolsar 749 euros. El consumidor debe gastar hoy día 150 euros más que hace cinco años para hacerse con la versión más básica del último teléfono lanzado al mercado por Apple pero, sin embargo, el salario mensual más frecuente en España ha permanecido estable”, señala Manuel Moreno, Redactor Jefe de Kelisto.es.
Kelisto.es ha analizado la variación de los precios de salida que tenían cuando se lanzaron al mercado los terminales “tope de gama” de Apple y Samsung, compañías que suman entre ambas aproximadamente el 45% de los terminales vendidos en España. Para hacerse con el modelo más básico (16 GB) de iPhone 4s –el dispositivo que la compañía de Cupertino puso a la venta en 2011- había que pagar 599 euros en el mercado libre. Sin embargo, para adquirir hoy día la versión más básica (16 GB) del iPhone 6s, el último modelo puesto a la venta en septiembre de 2015, hay que desembolsar 749 euros. Esto supone que Apple ha subido un 20% en cinco años el precio del modelo más básico de su terminal estrella.
En el caso de Samsung, el importe a pagar ha variado desde los 649 euros que costaba la versión más básica del Samsung Galaxy SII cuando se lanzó en 2011 a los 719 euros que habrá que pagar por el recién anunciado Samsung Galaxy S7, que comenzará a comercializarse en España el próximo 11 de marzo. Esto supone un aumento de precios del 10% en el caso de las versiones más básicas de los terminales más avanzados de la firma coreana en los últimos cinco años.
“Curiosamente, mientras otros gadgets como los televisores o los ordenadores bajan su precio a pesar de continuar evolucionando y cada día se pueden encontrar más baratos y con mayores prestaciones, en el caso de la telefonía móvil la tendencia es opuesta: para hacerse con la mejor tecnología hay que pagar cada vez más dada la subida de precios que imponen los fabricantes. A esto se suma el deseo creciente de los consumidores por hacerse con los últimos terminales, lo que les lleva a cambiar de teléfono móvil, de media, cada 18 meses”, comenta Moreno.
