El tablet sigue a la baja. Las ventas mundiales de tabletas cayeron un 7% en el segundo trimestre del año. En concreto, entre abril y junio se comercializaron 44,7 millones de unidades, según los datos preliminares aportados por IDC. Si se compara el segundo trimestre con el primero del año, la caída es del 3,9%.
Siguen pesando sobre el negocio de las tabletas la poca innovación que percibe el usuario y las escasas ampliaciones del catálogo de producto que exhiben los fabricantes si se compara con el dinámico universo del móvil. Son factores que desincentivan la renovación de producto o la primera compra. Además, si se mira a la tabla de fabricantes, se identifican algunas tendencias. Y es que, por ejemplo, Apple y Samsung siguen perdiendo cuota de mercado, en beneficio de Lenovo y sobre todo Huawei, que ha doblado números, y de LG, que ha multiplicado por más de tres.
En cualquier caso, las dos primeras marcas siguen acaparando más de un 40% del total. También tienen menos peso los cinco primeros fabricantes del ranking, que pasan de tener un 58% a un 54% del total. Los pequeños avanzan y el mercado se sigue diversificando, y grandes firmas que no aparecían en la parte alta de la tabla, como Huawei, ahora irrumpen con fuerza. Es el caso también de la compañía californiana E-fun, que entra en el top10 después de un año fuera del mismo.
Yendo a las cifras concretas por fabricantes, Apple sigue liderando con su línea iPad el mercado. Según IDC, en el segundo trimestre colocó en el mercado 10,9 millones de tabletas (24,5% del total). Samsung, por su parte, logró vender 7,6 millones de aparatos (17%). Por su parte, Lenovo se mantuvo en tercera posición, con 2,5 millones (5,7%), y los mayores avances llegaron por parte de Huawei y LG, que crecieron un 103% y un 246%, respectivamente. Ambas marcas comercializaron 1,6 millones de tabletas cada una.
En definitiva, unos ciclos de vida más largos, la dura competencia de los móviles, donde los catálogos se renuevan con mucha celeridad, y el hecho de que los usuarios puedan instalar la última versión del sistema operativo sin ningún problema han hecho que las ventas de tabletas vayan a la baja y que el entusiasmo inicial por el formato (el primer iPad data de 2010) se haya apagado, según apuntan desde IDC. En todo caso, no está ni mucho menos muerto y las posibilidades de los dos-en-uno (híbridos de tableta y portátil) en el hogar y en mundo profesional le pueden dar un nuevo impulso al formato.