De acuerdo con un estudio de IDC España, patrocinado por EMC, JasperSoft, Microsoft y Sybase, el mercado de Big Data se encuentra actualmente en una fase de eclosión en nuestro país. Y es que, hoy en día un 4,8% de las compañías que componen el tejido empresarial español ya han incorporado estos procesos e instrumentos a su negocio y se prevé que para finales de 2012 la adopción llegue al 7,6%. Es más, el 19,3% están familiarizadas con el concepto y el 14,6% se plantea su uso en el futuro.
No es de extrañar que se augure un buen porvenir a una tecnología que viene a poner orden y concierto a la ingente y vertiginosa cantidad de información que fabricamos y que da lugar a enormes repositorios –que pueden alcanzar petabytes, exabytes o zetabyates- de datos desestructurados (presentes en correos electrónicos, redes sociales, fotografías o vídeos, por ejemplo) que se replican y disuelven a gran velocidad. Lo que promete el “análisis de datos masivos” (aceptada traducción del término) es extraer contenido relevante de la maraña que generamos y en el momento adecuado. La propia consultora advierte que la explosión del universo digital ascenderá a los 2,7 zetabyates en el presente ejercicio empujando, de esta manera, las necesidades de las organizaciones para gestionar, capturar y analizar información. Así las cosas, el volumen se dibuja como el principal catalizador del Big Data, pero las empresas buscan también conseguir un mayor control de costes y una mejora de su toma de decisiones.
Otra de las conclusiones que saca a la luz el informe es que la falta de talento se presenta como una oportunidad para las compañías de servicios TI. “Resulta especialmente interesante destacar que, teniendo en cuenta la escasez de perfiles especializados en estas tecnologías dentro las organizaciones y el interés de las empresas por esta tecnología, se generará un importante mercado de servicios de Big Data”, afirma José Curto, analista senior de IDC.
Finalmente, el estudio recuerda que en España estos sistemas se encuentran en un momento incipiente pero que la velocidad de adopción es diferente según el tamaño de los clientes y el campo de actividad en el que operen. El sector de distribución es el primero en acogerlo, seguido por el sector financiero. Además, las compañías de más de 500 empleados son las más avanzadas en conocimiento, aunque las de entre 100 y 500 trabajadores son las que dominan la implantación del modelo.
El creciente ecosistema de proveedores y fabricantes conjuntamente con el claro interés por parte de las empresas, augura un futuro optimista para Big Data, que pasará a ocupar una parte importante de los planes de negocio de las organizaciones.