El cloud computing, poco a poco, se está convirtiendo en un valioso elemento para la estrategia empresarial actual. Un fenómeno impulsado por el aumento de la competitividad y por el hecho de que los trabajadores exigen acceder a la información en cualquier momento y desde cualquier lugar.
Prueba de ello es el estudio realizado por Brocade, que revela que hasta un 48% de las empresas europeas ya están implantando arquitecturas cloud, y más de la mitad considera que el beneficio principal que les aporta la nube consiste en una mayor agilidad en sus negocios. Y es que el ahorro de costes, tanto fijos como variables, constituye un beneficio secundario para el 16 y el 14% respectivamente.
Para realizar la encuesta, el cloud computing se definió como un paradigma de computación en el que se ofrecen funcionalidades TI escalables y flexibles, como un servicio a los clientes mediante tecnologías de Internet. Es tal el grado de satisfacción con la nube, que el 85% de las compañías que ya migraron a ella tienen previsto escalar aún más sus implantaciones en el próximo año.
El rendimiento, la fiabilidad y la sencillez de la red serán factores fundamentales de los que dependerá el correcto funcionamiento de esas nubes. Y es que, según Gartner, en 2013 al menos el 60% de las empresas sufrirá una disminución de rendimiento de sus aplicaciones debido a un diseño inadecuado de su red. Por ello, una mala infraestuctura de estas redes puede jugar en contra del desarrollo correcto del cloud.
Este estudio llevado a cabo por Brocade, conjuntamente con el Cloud Industry Forum, destaca que el 90% de los encuestados están incluyendo arquitecturas cloud en sus estrategias de tomas de decisiones de TI. Esto permite concluir que la red es considerada un elemento clave para el buen funcionamiento de estos sistemas.
Para Fernando Egido, director general de Brocade España, “la nube es uno de los temas estrella de los medios de comunicación desde hace varios años, y muchas empresas lo ven como poción mágica que puede solucionar sus desafíos operativos. Sin embargo, a menos que se adopte un estrategia TI adecuada, el cloud puede causar más problemas que soluciones. Las redes de hace 5 ó 10 años no estaban diseñadas para trabajar así, por lo que esperar que estén preparadas para hacer frente a estas necesidades es un error”.
