La campaña de navidad se decide en el último suspiro

El canal y los analistas no tienen claro que las próximas Navidades vayan a suponer un punto inflexión en la tendencia que vive el negocio informático desde verano. En otras palabras, no van a ser unas Navidades para tirar cohetes. Los términos que más se repiten son “atonía” e “incertidumbre”. Los más convencidos llegan a hablar de “moderado optimismo”. Todo –el panorama económico nacional, el paro y pobres expectativas de los consumidores- hace presagiar que las ventas no sobrepasarán a la campaña de 2009. Andreu Rodríguez, el primer ejecutivo del primer grupo minorista de informática del país, Ticnova, que engloba las cadenas de tiendas Beep y PCBox y que sirve a 700 puntos de venta, habla precisamente de “apatía” y reconoce que “es difícil ser optimista en cuanto a un cambio de tendencia” en lo que queda de año. Por su parte, en el equipo de marketing de PC Citymantienen la “incertidumbre”, sobre todo debido a que año tras año el periodo de compra de contrae. “Los españoles ya no comienzan [a comprar] a finales de noviembre o principios de diciembre, sino que hacen casi todo en las dos últimas semanas”. Pero no queda ahí la cosa. Los últimos datos de Gartner sobre venta de PC en el tercer trimestre, que acaban de aparecer, alimentan las dudas. Y es que Gartner ha constatado una cierta ralentización en el ritmo de ventas de ordenadores en todo el mundo desde julio a esta parte. Según sus datos, en el tercer trimestre del año este negocio sólo avanzó un 7,6%, un poco más de la mitad de lo previsto y mucho menos de lo que progresó en los primeros seis meses del ejercicio. La consultora achaca este panorama a una causa principal: ante la avalancha de nuevos formatos, sobre todo pizarras electrónicas o tablets, los consumidores han decidido posponer sus compras y esperar a ver qué sale (y a qué precios) hasta finales de año. Como sugieren en PC City, un argumento más para sostener que la campaña de Navidad se va a jugar en los últimos minutos, como si de un partido de baloncesto se tratara. Para enrevesar más las cosas, éstas pueden ser las Navidades del libro electrónico. Pese a todos estos interrogantes, parece claro, como se desprende de lo explicado anteriormente, que el último ingenio de la factoría de Steve Jobs, el iPad, y las tabletas de sus rivales en el mundo PC, como Samsung, MSI, Archos, Dell, Toshiba o Asus serán protagonistas. Queda por ver hasta qué punto se venden como dispositivos independientes o subsidiadas por las operadoras, puesto que se trata de un aparato muy apto para el ocio multimedia offline (permite ver películas y escuchar música con una gran autonomía), pero que también está concebido para la conexión permanente a Internet, como si de un smartphone se tratara. En este sentido, el reciente lanzamiento por parte de Vodafone de la Samsung Galaxy Tab (7 pulgadas y algo menos de 400 gramos), que puede ser adquirida desde 199 euros si el usuario contrata una tarifa plana de Internet por otros 49 euros mensuales, puede marcar el camino. En cualquier caso, estamos ante un producto novedoso, cool, fácilmente transportable y con un precio “de regalo navideño” que irá desde los 200 a los 500 euros, dependiendo de tamaños, configuraciones y cuadros de tarifas de las telecos. Un estudio de Gartner que acaba de salir del horno asegura que este año se van a vender casi 19,5 millones de tabletas multimedia, mientras que en 2012 sobrepasarán los 100 millones y en 2014 superarán los 200 millones. Gartner asegura que los portátiles de bajo coste, los lectores de libros y otros dispositivos de electrónica de precio similar sufrirán el embate de las pizarras en los próximos años. Hay, pues, tablets para rato. Libro electrónico y juegos Pero estas Navidades también pueden suponer la consagración de los e-readers. Las principales editoriales del país están ahora mismo pasando sus títulos más leídos al formato ePub y los lectores electrónicos, provistos de su característica pantalla de tinta electrónica, tienen una oportunidad, sobre todo porque son también un artículo de fácil transporte, con un precio incluso más ajustado a bolsillos maltrechos que los tablets (en torno a los 250 euros de media) y con un amplio y atractivo fondo, por fin, de contenidos disponibles. En este ámbito, Grammata, Sony, Samsung e incluso Amazon, que vende desde su página web el Kindle, han presentado novedades en los últimos meses. Pero no queda ahí la cosa. Desde PC City, una cadena con más de 30 grandes superficies repartidas por los grandes centros comerciales del país y que vende cada año informática y electrónica por valor de 230 millones de euros, aseguran que la categoría ganadora por estas fechas suele ser la de videojuegos, y este año no va a ser menos. La culpa la tienen esta vez salida al mercado de Move, el dispositivo de control de movimiento de la PS3, o Kinect, el revolucionario mando de la Xbox 360 que se pone a la venta en noviembre y que permite interactuar con la consola sin tocar nada, sólo a través de gestos, de la voz y del propio movimiento del cuerpo. Es previsible que todos los juegos adaptados para aprovechar las posibilidades de estos avances de Sony y Microsoft, unidos a clásicos que confirman su lanzamiento para estas fechas, como Call of Duty, GT5 o Los Sims para consola, también brillen con el cambio de año. Jeremy Davies, un observador del mercado nacional que dirige la consultora de mercado Context, cree que los españoles no están para muchas alegrías y que este año no gastarán en regalos muy caros. Nadie sabe muy bien dónde va a estar la frontera de lo permisible, aunque los 500 o los 600 euros podrían marcar la cota de lo que razonable según está el panorama económico. Teniendo esto en cuenta, es probable que los televisores LED tengan que esperar un poco (los de 32 pulgadas y Full HD rondan los 800 euros). Más aún tendrán que esperar los televisores 3D. Los modelos que hay ahora en el mercado cuestan varios miles de euros, y los bolsillos no están para esas alegrías. Además, por el momento hay pocos títulos en el mercado y prácticamente ningún canal de televisión emite en 3D. Los que sí pueden tener su oportunidad este invierno son los fabricantes de sobremesas all-in-one, donde la CPU y todos los componentes van en la parte trasera del monitor y que suelen incorporar una pantalla táctil de generosas dimensiones. Se trata de un formato muy familiar, que ahorra espacio y que puede servir de punto de encuentro digital para todos los miembros de casa. Los precios van desde los 300 euros de los dispositivos más sencillos (16 pulgadas e Intel Atom) a los 1.500 o 2.000 de las versiones mayores de HP Touchsmart, Sony Vaio o Mac. Precisamente, esta variedad de precios (y tamaños) permitirán que las familias puedan ajustarse y comprar el equipo que más les convenga. El portátil tendrá su papel A pesar de todas las incertidumbres que rodean ahora mismo al portátil, que puede ver mermadas sus ventas por el iPad y los tablets de la competencia de Apple, en Intel son “moderadamente optimistas”. “Los estudios de intención de compra de que disponemos nos dicen que las ventas de PC siguen creciendo y que la demanda continuará aumentando en este último trimestre”, asegura Javier Galiana, director de consumo de Intel en España. El directivo alude a un estudio encargado por la compañía que asegura que la intención de compra de ordenadores ha crecido un 10% frente al año pasado. “Apoyándonos en el éxito de nuestra familia Intel Core [i3, i5 e i7], esperamos una leve mejora de las ventas, que estará en torno al 10 o 15% en unidades”. De cualquier manera, en Intel tienen claro que el portátil y todo lo que venga que ver con la movilidad volverá a centrar las demandas de los consumidores. En estos momentos, un 80% de los equipos personales que se venden en España son notebook en algunas de sus variantes. Un informe del Social Insights Research de Intel dice que casi el 80% de los europeos, españoles incluidos, considera que es importante conectarse a comunidades online y grupos de interés a diario. Asimismo, algo más de la mitad (52%) de los encuestados opina que se verían “aislados” sin un dispositivo móvil. Está por ver cómo se comportarán los netbooks. Los últimos datos de mercado que están saliendo detectan una ralentización en las ventas de miniportátiles de bajo coste. Forrester predice que esta gama de equipos, que a principios de este año rozó el 20% de todos los portátiles comercializados, irá para abajo y acabará con un 10% de cuota en 2014. En los últimos tiempos, los consumidores están volviendo su mirada a los portátiles tradicionales y con precios alrededor de los 600 euros.