Alma Consulting Group ayuda a las empresas a gastar menos impuestos

Un 65% de las empresas pagan de más en el impuesto sobre bienes inmuebles. Alma promete un ahorro sustancial del 10%.

Publicado el 31 Ago 2010

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Alma Consulting Group, consultora dedicada al asesoramiento operacional y optimización de costes, ofrece a las empresas su servicio de optimización de la fiscalidad local, a través del cual ha generado a sus clientes un ahorro sustancial recurrente.   En la actualidad, el valor catastral es la base imponible de diferentes impuestos indirectos como el impuesto de bienes inmuebles, las plusvalías o el impuesto de actividades económicas, y se está convirtiendo en la de otros de reciente creación como la tasa de basura o el recargo por transporte público, por lo que es importante tener en cuenta que el inmueble soporta una carga impositiva elevada y además no es estático ya que su valor se modifica con el paso del tiempo.   Partiendo de esta premisa, desde Alma calculan que en más del 80% de los inmuebles existen discrepancias de valoración catastral. Y es que muchas de las actuales valoraciones proceden de finales de los noventa y son resultado de unos parámetros muy homogéneos y que tienen poco en cuenta las particularidades. Esto provoca una serie de desajustes que pueden llevar a pagar más.   Y es que, de acuerdo con datos de Alma Consulting Group, actualmente el 60% de los activos está por encima de su valor y el 30% por debajo, lo que origina una imposición indebida a las empresas. Por ejemplo en el caso del impuesto de bienes inmuebles, se estima que un 65% de las organizaciones sufren sobreimposiciones fiscales en este impuesto.   Para Emmanuel Mielvaque, director general de Alma Consulting Group, “la carga fiscal que soportan las organizaciones está aumentando. Ayudar a las empresas a detectar una desviación entre el valor catastral, la contribución fiscal obligatoria, el elemento esencial para la evaluación de otras cargas fiscales, y el valor real del inmueble, recalculándolo en virtud de la ponencia de valores, es fundamental para que las empresas sólo paguen por el valor real del edificio y, en consecuencia, optimicen su base imponible de cara a las diferentes cargas fiscales a las que deben hacer frente”.

                 

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