El Partner Summit 2006 de Intel se hizo de rogar. El mayor evento para distribución celebrado por la compañía no dio muestras de novedad hasta el último suspiro. Fue entonces cuando Jeff Hoogenboom, director general de operaciones para canal de distribución de Intel, se subió al escenario para anunciar la última iniciativa que el fabricante ha ideado para que los ensambladores locales no se queden fuera de la carrera del portátil. Precisamente, éste es el área en la que mejores resultados cosechó Intel el año pasado, con un crecimiento del 71%, seguido del área desktop, con un 28%, la de servidores, con un 26% y la de placas madre, con un 16%.
En la actualidad, los partners de canal, es decir, aquellos retailers y fabricantes locales que compran producto de Intel a través de mayorista, aportan el 29% de la facturación de la compañía y el 37% en términos de volumen (ventas de unidades). El dato más preocupante es que la distribución de Intel apenas está participando en el mayor motor de crecimiento de la compañía. En la actualidad, tan sólo un 10% de las ventas de productos de movilidad del gigante norteamericano son generadas por el canal indirecto. La firma sabe que ha llegado el momento de implicarse con los más pequeños y ha diseñado un programa con el que pretende acabar con cuatro obstáculos principales con los que se encuentran los ensambladores locales en este terreno: estandarización de componentes, acceso a soporte técnico, servicio de logística e imagen de mercado. Intel parece conocer muy bien cuáles son las barreras de unos socios que, hasta la fecha, no han podido competir en precio (sus pequeños volúmenes en pedidos a los fabricantes asiáticos de componentes de PC no permitían costes rentables) y ni contra la percepción de la calidad de sus productos en el mercado.
Para acabar con ellas, el fabricante de procesadores ha llegado a un acuerdo con tres de los principales fabricantes de componentes y barebones de PC en el mundo: Asus, Quanta y Compal. Estas tres firmas asiáticas suman cerca del 70% de los equipos que se fabrican hoy en día en el mundo. Como explicaba a esta publicación Jim Noble, director de plataformas móviles dentro de la división de canal de Intel, Verified by Intel es una iniciativa por la que su compañía certificará que los componentes y barebones (habrá once referencias específicas) suministrados por estos tres proveedores van a ser compatibles e intercambiables entre sí sin que la calidad del portátil final se vea dañada. Intel ha diseñado siete categorías de componentes en lo que denomina como common building blocks: discos duros, discos ópticos, paneles LCD, baterías, teclados, adaptadores eléctricos y chasis. Así, un ensamblador podrá elegir cualquiera de estos productos independientemente de si están fabricados por Asus, Quanta y Compal para montar un portátil. Gracias a esta estandarización, el suministro y disponibilidad de producto está mas asegurado, así como el servicio posventa en el caso de que haya algún componente defectuoso. El producto se podrá adquirir a partir de mediados de mayo a través de los mayoristas de Intel.