La utilización de resoluciones elevadas es especialmente interesante cuando se necesite retocar con precisión las instantáneas o realizar impresiones en gran formato. Ambas tareas pueden ser llevadas a cabo con eficacia gracias al sensor CCD de 5 millones de píxeles integrado en esta solución. Además, es capaz de alcanzar una resolución máxima de 2.588 x 1.954 puntos. Y dispone de batería de ión de litio, 32 MB de memoria interna y zoom óptico de 3X.
Esta solución de Kodak no sólo presume de un avanzado dispositivo fotosensible, sino también de una óptica y una electrónica solventes, completando un trinomio ambicioso que ha hecho valer su eficacia en el banco de pruebas de VNU Labs. El tratamiento tanto de la luz como del color es muy bueno incluso en circunstancias exigentes. Asimismo, enfoca sin problema alguno trabajando tanto en modalidad macro como en entornos con escasa luminosidad. No obstante, se echa en falta algo más de potencia en el flash que incluye, por lo que para hacer fotografías en malas condiciones de luminosidad con garantías puede ser necesario utilizar uno externo de mayor potencia.
La automatización tanto de la configuración de todos sus ajustes como de la transferencia de las instantáneas al PC es una de sus ventajas.