El paro continúa siendo la principal preocupación entre los españoles, por encima incluso de la situación económica, que ocupaba el primer puesto entre sus inquietudes hace un año. El 78% de los ciudadanos de nuestro país cree que el mercado laboral todavía no estará en buenas condiciones dentro de doce meses, un porcentaje que, si bien mejora en tres puntos con respecto al segundo trimestre, evidencia cómo la inestabilidad laboral preocupa, y mucho, a los españoles, según los datos del último Estudio Global de Confianza de los Consumidores elaborado por la consultora Nielsen.
Estos datos, hechos públicos con motivo de las últimas cifras de paro difundidas hoy por el Ministerio de Empleo y que arrojan un incremento en las listas de casi 80.000 desempleados en octubre, destacan cómo la recuperación de la confianza en España es lenta, ya que sólo el 20% de los españoles consideran que sus expectativas de trabajo son buenas o muy buenas, un dato que mejora en cuatro puntos con respecto al trimestre anterior y en ocho respecto al mismo periodo de 2013.
Aunque en España las perspectivas laborales mejoran a un ritmo superior a la media europea, todavía se sitúan a 14 puntos porcentuales de la media europea, donde el 64% de nuestros vecinos reconoce que las expectativas sobre la estabilidad en el empleo no son del todo halagüeñas, tras haber mejorado dos puntos en el último trimestre debido, en buena medida, al frenazo de algunas de las economías más dinámicas de nuestro entorno como Alemania, donde más de la tercera parte (37%) de sus ciudadanos respalda estas “grises” expectativas.
Aún así, Alemania es la única gran economía en la que hay mayoría de ciudadanos que se muestran optimistas sobre lo que el futuro les deparará en el ámbito laboral, ya que 59% considera que la situación será mejor dentro de doce meses.
Más llamativo es el caso de nuestro país vecino, Francia, donde si bien mejoran las perspectivas laborales en un punto porcentual con respecto al segundo trimestre, lo cierto es que todavía el 84% de los galos considera que no son buenas. En idénticos ratios se mueven algunos de los países rescatados como Grecia, donde también ocho de cada diez de sus ciudadanos comparte esta visión un tanto catastrofista del empleo.
Según el director general de Nielsen Iberia, Gustavo Núñez, “si bien es cierto que la estabilidad laboral sigue siendo la principal preocupación de los ciudadanos españoles junto con la situación de sus finanzas personales, lo cierto es que poco a poco el crecimiento de la economía española y las perspectivas que tienen sus ciudadanos se afianzan y mejoran. El índice de confianza de los consumidores volvió a crecer en el tercer trimestre hasta alcanzar los 65 puntos, lo que supone un avance de tres con respecto trimestre anterior. La confianza de los españoles es la que más crece entre las grandes economías europeas”.
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