La cadena de tiendas de electrodomésticos Miró vuelve a estar contra las cuerdas. El pasado 29 de julio la sociedad Kabaena Directorship, dependiente del fondo de inversión Springwater Capital, propietario de la cadena, presentó solicitud de concurso voluntario ante el Juzgado Mercantil 3 de Barcelona. Y hace unos días, el 23 de agosto, la compañía comunicó a sus 339 trabajadores su intención de presentar un ERE que afectará a toda la plantilla.
Según una información de Alimarket Electro, la dirección de Kabaena Directorship ha señalado que la medida no tiene que suponer necesariamente el cierre definitivo de la cadena, ya que hay conversaciones con algunas empresas nacionales e internacionales que podrían estar interesadas en quedarse con la marca Miró y con su estructura. En la comunicación de la dirección al comité de empresa también se habla de esta posibilidad.
Además, Matteo Buzzi, CEO de Kabaena Directorship, ha señalado que no es intención de los propietarios vender tiendas de forma aislada, sino preservar el proyecto en su totalidad. Durante agosto, y según indica la información de Alimarket, Miró ha cerrado prácticamente todas aquellas tiendas que se encontrarían fuera de Cataluña y que no estaban incluidas en el ERE inicial presentado hace tres meses.
Hay que recordar que Springwater Capital se adjudicó Miró en subasta pública de Miró en noviembre de 2014 por un total de 3 millones de euros. En aquellos momentos, Miró lanzó un ambicioso plan de expansión que debía llevar a la cadena a facturar 300 millones de euros y a contar con más de 200 tiendas en 2017.
Sin embargo, en los últimos meses, en Miró sólo se ha hablado de ajustes y del cierre de tiendas no rentables. En la página web de Miró hoy sólo figuran 27 tiendas operativas, todas concentradas en Cataluña, salvo dos que están en Baleares. Además, según Alimarket, en 2015 la compañía facturó unos 95 millones de euros.