La búsqueda de alternativas eficaces para hacer frente a la recesión económica en la que estamos inmersos desde hace unos años ha hecho que muchos modelos de negocio se estén reinventado. Un buen ejemplo de ello puede ser el giro hacia los servicios que están dando los distribuidores de informática y otro la posibilidad de abrir una franquicia para hacer frente con un mayor apoyo los avatares que trae consigo el mercado. Pues bien, detengámonos en este último. Como recientemente publicaba CHANNEL PARTNER, la compañía especializada MundoFranquicia Consulting ha realizado un informe sobre el segmento de la franquicia en nuestro país, dejando claro que el modelo estaba reduciendo las trabas iniciales con el objetivo de facilitar la entrada de los nuevos emprendedores, dado los problemas que las entidades bancarias están poniendo a la hora de conceder créditos. Asimismo, el informe apuntaba que se trata de un modelo de negocio que ha sufrido una ralentización en su crecimiento, ya que antes de la crisis económica su ritmo de avance se situaba en dobles dígitos, mientras que ahora prácticamente se ha estancado.
Entrando de lleno en el tema, no hay duda de que la franquicia se ha visto perjudicada en este ambiente de recesión por el simple hecho de que, al tratarse de tecnología, la financiación tiende a ser superior. A esto hay que añadir los problemas que ha venido presentando el propio sector de las TIC, en el que pocos segmentos de actividad se han librado de caer devorados por las fauces de la crisis. No obstante, el panorama no parece tan oscuro para este modelo de negocio, en el que siguen consolidándose aquellas franquicias que han trabajado con fuerza y de un modo más profesional, siendo las más débiles en ambos aspectos las que han tendido a la desaparición.
Lo corrobora el propio Xavier Robert, jefe de expansión de Ticnova, en la que se integran las tiendas Beep y PCBox, asegurando que “el sector de la franquicia de informática se encuentra en un buen momento ya que la crisis iniciada en 2007 se ha encargado de hacer la limpieza de franquicias poco profesionales y sin recursos. En este momento, el mercado se reduce a muy pocas enseñas capaces de garantizar el éxito y servicios”. Según la consultora Tormo, a cierre de 2009, el sector de la franquicia informática estaba integrado por 24 cadenas, tres más que las que se contabilizaban en 2008. Estas 24 marcas agrupan a su vez a 2.300 establecimientos, lo que supone una reducción del 8,4% respecto al año precedente. Por su parte, MundoFranquicia coincide en el número de enseñas, pero rebaja la cantidad de establecimientos a 1.973. “Para 2010 se espera que el sector recupere cierto dinamismo, aunque no se esperan crecimientos elevados”, reconoce María Dolores Sevillano, directora del departamento de consultoría de Tormo.
A lo anterior se unen algunos cambios que se han producido en el sector y que Antonio Sánchez, director de marketing de Tiendas Dynos Informática, red muy asentada en el sur de España, sitúa tanto “en la actitud del consumidor, mucho más reflexiva ante la compra, como en la mayor importancia que se otorga al servicio en general”. “Por ello”, añade, “Dynos ha reforzado su trato al consumidor, tanto en el asesoramiento como en la asistencia técnica. Hay que tener en cuenta que muchos usuarios han retrasado la renovación de sus equipos informáticos, optando por labores de mantenimiento”.
No obstante, el futuro parece mucho más halagüeño que el presente y, por supuesto, que el pasado más reciente, dado que las centrales de franquicias auguran una evolución positiva en el año 2010, así como un tímido ascenso de la demanda. De este modo, prevén comenzar 2011 con mayor fuerza y crecimientos moderados. “Tenemos la gran ventaja de que la informática ha pasado en relativamente pocos años de ser un hobby a casi una primera necesidad. Ya no sabemos vivir sin tecnología. El sector de franquicia informática ha sufrido en los últimos tiempos, pero a su vez ha sido de los más estables. Independientemente de la situación económica, el crecimiento tecnológico en nuestras vidas es una realidad que sólo nos hace ser optimistas en cuanto al crecimiento”, reconoce Rubén Crespo, responsable de APP Informática.
Menor inversión inicial En el mundo de la franquicia en general se ha experimentado un cambio en los requisitos de entrada, es decir, en los costes necesarios para formar parte de un grupo. Esto ha venido provocado por la crisis económica y las dificultades a la hora de conseguir créditos. En el ámbito informático parece haberse dado la misma tendencia, aunque con alguna que otra salvedad. “Es cierto que las empresas franquiciadoras, por lo general, tratan de reducir, en la medida de lo posible, las inversiones necesarias para la puesta en marcha”, corrobora María Dolores Sevillano, directora del departamento de consultoría de Tormo, una de las empresas que lleva más años estudiando esta modalidad de negocio en España.
En este punto, Xavier Robert, de Ticnova, considera que “en general, todas las franquicias de informática ajustan sus canones de entrada y costes para facilitar la entrada al mayor número de emprendedores”. “En nuestro caso”, añade, “tenemos la enseña PC Coste, que va destinada al autoempleo, con una mínima inversión y que resulta ideal para los profesionales y técnicos de informática”.
En cambio, en el caso de Dynos, Antonio Sánchez asegura que no ha sido necesario: “Nuestra política ha consistido siempre en ofrecer a los profesionales de la informática la oportunidad de montar su propia franquicia sin un gran esfuerzo inicial. Somos una de las franquicias informáticas con menor coste de derecho a entrada y canon de mantenimiento. De hecho, por 9.300 euros (en los que se incluye el mobiliario e imagen corporativa) una tienda puede pasar a ser franquicia Dynos y beneficiarse de nuestros precios, servicios y la sólida imagen de la cadena. En cuanto al canon de mantenimiento, es inexistente, ya que tan sólo se requiere un mínimo de folletos de publicidad mensuales. Por lo tanto, nuestros cambios no han implicado la rebaja de la inversión inicial, ya que consideramos que es el mínimo necesario para crear una nueva tienda”. Algo parecido sucede con otro de los líderes de este segmento de negocio, APP Informática. “Nosotros llevamos varios años ajustando la cuota de entrada con el ánimo de minimizar el coste de implantación del negocio y ayudar de esta forma a la gente que está decidida a unirse al grupo. Por lo demás, APP Informática no pide ningún tipo de aval y da muchísima libertad en la adecuación a la imagen corporativa de la empresa (mobiliario, metros del local y stock), siendo el franquiciado el que decide qué inversión realizar en este sentido”, explica Rubén Crespo. Menos espacio Otro de los aspectos que han variado con los problemas económicos que han lastrado la economía española ha sido el espacio mínimo que cada una de las tiendas debe tener para formar parte de una franquicia. Generalmente, las centrales han optado por disminuir la superficie con el objetivo de abaratar los costes iniciales de las empresas que emprenden la aventura, ya que es necesaria una menor cantidad de capital para acondicionarlo, así como para rellenarlo de mobiliario y, claro está, de stock de productos. Aunque no en todos los casos ha sido de este modo, pues también los hay en los que los requisitos ya eran bajos de por sí. Además, hay que tener en cuenta también que la cantidad de locales que hay disponibles en la actualidad ha aumentado y sus precios, bajado, con lo que el ajuste lo ha hecho el propio mercado. En realidad, la incertidumbre económica ha hecho que los costes de los alquileres hayan bajado hasta un 30% en ocasiones. Así pues, en este clima de dificultades y aunque el futuro vislumbre retazos de luz, no siempre ha sido sencillo salir adelante. “La informática está atravesando una época dura, en la que las franquicias que mejor lo han hecho en los años buenos son las que están superando la crisis”, reconoce Antonio Sánchez, de Dynos, que lo ejemplifica del siguiente modo: “Muchas de nuestras tiendas se muestran activas en cuanto a la ejecución de promociones, patrocinios, eventos, etc. en sus localidades, con las que llegan de forma directa a sus posibles clientes. La central apoya siempre este tipo de acciones, que dan un valor añadido a la tienda y la previenen de los ‘virus’ de la crisis. Tanto es así que nuestras bajas no han llegado al 10% del total de Tiendas Dynos, lo que consideramos un éxito, ya que otras enseñas han estado o están cerca del cierre”. Lo que parece claro es que, en general, las tiendas con más de tres años de vida mantienen bien la cartera de clientes y están capeando la crisis con relativa tranquilidad. “La mayor dificultad se encuentra en las tiendas que aún no están asentadas y que tienen pocos recursos económicos”, corrobora Xavier Robert, de Ticnova, para seguir argumentando que “para ellas es un reto difícil y en algunos casos el cierre se puede producir”. “De todas maneras, si se diera el caso, la franquicia también ayuda en el posible traspaso o la compra de la tienda. Eso sí, cabe señalar que el cierre de nuestras tiendas en el último año está volviendo a la normalidad, que es menor al 5%, es decir, una cifra sensiblemente inferior a la media general de todas las franquicias de cualquier sector. Ello es debido al aumento de ayudas que ofrecemos a nuestros franquiciados y, en especial, de la cadena Beep, aportando más margen comercial, así como promociones exclusivas”, añade. Finalmente, existe otra vía de ingresos que ha posibilitado el éxito de algunas de estas tiendas franquiciadas. Nos referimos a la reparación de equipos, que, como bien indican en APP Informática ha experimentado un importante crecimiento “debido a que mucha gente, en vez de comprar equipos nuevos, ha optado por ampliar o reparar los que ya tenía”. “De este modo”, asegura Rubén Crespo, “hemos vuelto a crecer con fuerza, sumando 60 tiendas más en 2009, llegando a 480, lo que demuestra la solidez y el éxito de nuestro modelo de franquicia en un momento complicado”. Ventajas de un franquiciado Una vez analizado el momento que está viviendo la franquicia informática y de haber corroborado que las perspectivas que se abren ante este modelo de negocio son optimistas, pasemos a detallar, según las propias centrales franquiciadoras, cuáles son sus principales ventajas. Por una parte, en Dynos lo tienen muy claro: “En el caso de la informática, el sistema de franquicia es muy ventajoso ya que, entre otros, aporta el respaldo de una marca en la que confían los consumidores. La franquicia unifica las condiciones y asegura unos estándares de calidad de la insignia. Además, los acuerdos con los fabricantes son mejores y, por tanto, los productos resultan más baratos, siendo mayores los beneficios para la franquicia. En el caso de Dynos, ofrecemos cursos de formación y proporcionamos información periódica actualizada de los nuevos fabricantes con los que trabaja la cadena, así como de los nuevos productos”, expone Antonio Sánchez. Por su parte, Xavier Robert, de Ticnova, ahonda mucho más en esta cuestión, recalcando los argumentos de Sánchez y añadiendo otros puntos igual de importantes, como es el caso de: una solución perfecta para el coste del transporte de mercancías; la obtención de mejores condiciones de pago y servicio por parte de las marcas y los distribuidores; venta a la administración a través de la central; participación en promociones exclusivas en periódicos y corporaciones; publicidad periódica en todos los medios; ventajas financieras frente a los bancos, financiaciones y pago en tarjetas de crédito; solución de todos los problemas técnicos en caso necesario desde la central; productos de marca propia (en el caso de Ticnova: Netway e Innobo); y un equipo comercial potente con recursos económicos para ayudar a las tiendas franquiciadas en la venta día a día. “Las ventajas son muchas, tantas que una tienda independiente hoy no tiene sentido en nuestro sector”, resume Robert. La idea que de formar parte de un grupo que asegure una mayor fuerza comercial también subyace en las palabras de Rubén Crespo, de APP Informática, al afirmar que “ser franquiciado te evita un montón de errores comerciales que cometen los empresarios noveles”. “Hoy en día”, continúa, “competir de forma independiente es una aventura prácticamente imposible. Evitar riesgos durante el primer año es muy importante. Además, una franquicia intenta duplicar una fórmula de éxito y en el caso de APP aporta la seguridad de un modelo sólido, rentable y competitivo, pudiendo formar parte de un gran grupo capaz de permitir a un pequeño negocio competir con la mejores ofertas ante cualquier centro comercial u otro modelo de competencia. A esto se añade el respeto de las garantías para clientes proveedores y marcas, el reconocimiento de marca, la plataforma logística, un avanzado sistema de gestión, los portes gratis… Son tantas ventajas que, aunque nadie puede asegurar el éxito al cien por cien, unir un franquiciado que mime a sus clientes con un modelo de franquicia de éxito es la mejor apuesta de futuro”. La franquicia en cifras ¿Hay suficientes franquicias?
