El fabricante de almacenamiento Kingston asegura en un estudio que muchas empresas ignoran el riesgo de no utilizar memorias USB encriptadas, lo que hace que no sigan una política de seguridad apropiada para estos dispositivos.
El informe europeo, réplica de otro llevado a cabo anteriormente en EEUU, confirma la necesidad urgente de que el entorno corporativo adopte productos y políticas USB con mayor nivel de seguridad. Un total de 2.942 profesionales de las TIC contestaron a la encuesta y todos ellos reconocieron la importancia de uso de las memorias USB desde el punto de vista de la productividad. El 71% de los encuestados en toda Europa confirmó que su empresa no cuenta con la tecnología para detectar la descarga de información confidencial a memorias USB por parte de personas no autorizadas.
Además, el 62% de las empresas han sufrido en los dos últimos años una pérdida de información sensible o confidencial a causa del extravío de estas memorias. Otro dato interesante es el que refleja que el 75% de los encuestados declara que los empleados de sus empresas utlizan memorias USB sin solicitar previamente permiso para hacerlo. Asimismo, el 38% de estas memorias son regalos recibidos en conferencias, eventos comerciales o encuentros de negocios.
Pero es que el 62% de los prefionales entrevistados asegura que sus empresas no estarían dispuestas a pagar un suplemento para adquirir memorias USB encriptadas y seguras. Y la mitad opina que sus empresas no consideran como una alta prioridad la protección de información confidencial y sensible descargada y almacenada temporalmente en memorias USB. Sólo un 43% de las empresas exigen el uso de contraseñas o bloqueos en las memorias USB de los empleados y sólo el 42% cuentan con sistemas de encriptado para los archivos contenidos en las mismas.
