Debido a su pequeño tamaño UGO X-Lite dispone de un número reducido de controles y conectores. Para evitar los inconvenientes que podrían derivarse de la primera de esas carencias, se ha dotado al mando a distancia de una importancia decisiva, pues únicamente por medio de él se puede controlar el aparato.
Tan compacto como eficaz, este proyector está basado en tecnología XGA, lo que implica una resolución real de 1.024 x 768 puntos, y cuenta con una lámpara de 800 lúmenes ANSI. Resulta especialmente reseñable el hecho de que, a diferencia de la gran mayoría de los proyectores analizados en esta comparativa, éste incluye una única pantalla LCD interna de 0,67 pulgadas.
Con estas características técnicas, el rendimiento mostrado a lo largo de las pruebas puso de manifiesto cualidades especialmente satisfactorias en el ámbito de la convergencia del color y el tratamiento de las imágenes.
Las conexiones de Philips UGO X-Lite se componen de una entrada S-Vídeo y un jack para el audio, además de una entrada RCA de vídeo y otra RGB para la conexión del PC en sí. Esta austeridad se debe, como es lógico, al condicionamiento que supone su reducido formato.