Más de 200 profesionales acudieron al Cibersecurity Summit, un encuentro organizado por Axis Communications para analizar la situación y tendencias en materia de ciberseguridad, así como para ilustrar acerca de las principales amenazas que afectan a las empresas españolas por los continuos ciberataques. El evento se centró en destacar la concienciación, capacitación y regulación como claves a la hora de reducir los riesgos ante las continuas amenazas, en un escenario donde más del 94% de las empresas españolas sufrió un incidente de seguridad durante el pasado año, según datos del Incibe.
“Aunque las cifras facilitadas por el INCIBE demuestran que las ciberamenazas pueden impactar a empresas de sectores y magnitudes diferentes, seguimos viendo que una multitud de compañías continúan sin realmente entender su magnitud. Como resultado, muchos de ellos siguen sin haber implementado medidas de seguridad para proteger sus dispositivos, sistemas e información y evitar la pérdida de confidencialidad e integridad de sus datos. Esto consecuentemente aumenta la vulnerabilidad de la empresa y les convierte en una presa fácil”, explica Alberto Alonso, ingeniero de Soluciones de Axis.
Más del 94% de las empresas españolas han sufrido un incidente de seguridad durante el pasado año
En este sentido, los proveedores de servicios esenciales u operadores críticos son aquellas empresas más susceptibles de recibir un ciberataque en España y, por tanto, deberían ser los más vigilantes. De ahí la importancia de mantener un control especial, no solo en los sistemas ya instalados, sino también en la selección de los dispositivos y sistemas pendientes por instalar – por ejemplo, el modo en que se parametrizarán y se gestionarán –. Además, otro aspecto fundamental para garantizar la seguridad de una red empresarial es mantener esta alerta constantemente, tener una documentación clara sobre cada dispositivo e implantar políticas y procedimientos que aumenten la ciberseguridad.
“Los ataques serán cada vez más comunes en el entorno de sistemas OT e incluso más en los sistemas de seguridad física. Por tanto, la mitigación del riesgo, la adecuación a la normativa o la implementación de medidas de seguridad, pueden suponer un cambio radical en la dinámica empresarial hacia la proactividad y prevención, lo que a su vez permite también evitar gastos elevados de todo tipo una vez producido el ataque. Para ello es también fundamental disponer de una normativa adecuada a la realidad de los sistemas de seguridad física, su implantación y su gestión”, concluye César Álvarez, coordinador de proyectos de la Fundación Borredá.