Para tratarse de un modelo de 17 pulgadas (equivalente a un CRT de 19), la cantidad a desembolsar es mínima teniendo en cuenta sus características y dimensiones: tan sólo 603 euros, IVA incluido. La resolución máxima es de 1.280 x 1.024 y, aunque soporta los 75 Hz, el fabricante recomienda trabajar a 60 Hz. El tamaño del punto es 0,264 mm y los ángulos de visión pasan por registrar 130º en horizontal y 110º en vertical. En cuanto a su diseño exterior, esta unidad exhibe un elegante color oscuro y dimensiones muy reducidas, lo que permite ubicarla casi en cualquier lugar de nuestro escritorio con un consumo de espacio mínimo. Un detalle interesante es el acceso a su menú OSD a través de cinco botones situados en la parte inferior izquierda, lo que agiliza el proceso de configuración.
Lo que sí que hemos constatado es un recorte de algunas prestaciones para adaptarlas a su reducido precio de venta al público. En este sentido, no cuenta con entrada digital, micrófono, altavoces o entradas y salidas de audio. Si nos referimos a su peso, en parte es tan liviano (seis kilogramos frente a los 8 de media que suelen registrar los productos de este tipo) gracias a que el alimentador de corriente no está integrado.
Finalmente, con respecto a la calidad de visualización, tanto el brillo como el contraste se mantienen en valores medios, con 250 cd/m2 el primero y 350:1 el segundo. En definitiva, esta solución posee todas las características que un usuario-tipo puede necesitar, salvo prestaciones multimedia, a un coste más que atractivo.
