El fondo Elliott Investment Management ha sacudido el escenario para Hewlett Packard Enterprise (HPE). Tras hacerse con una participación superior a los 1.500 millones de dólares, este fondo de inversión exige ahora la salida del CEO de la compañía, Antonio Neri, por entender que no llega a maximizar el valor para los accionistas. La mera filtración de la carta enviada a la junta directiva impulsó el valor bursátil de HPE un 7 % la semana pasada, aunque el título sigue un 30 % por debajo de su nivel de hace 12 meses.
Elliot es un fondo de inversión «activista». Es decir, que tiene vocación de adquirir participaciones significativas en empresas cotizadas con el objetivo de influir en sus decisiones corporativas y estrategias. Según publica CRN.com, que se basa en una información del medio estadounidense Semafor, Elliott remitió la misiva a principios de la semana pasada y evitó proponer un sustituto concreto. La junta de HPE, presidida por Patricia Russo, una directiva de largo recorrido en el sector tecnológico, tiene previsto reunirse «en los próximos días» para evaluar la petición y sopesar el futuro de Neri, que dirige la compañía desde 2018.
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Una junta bajo presión y una estrategia en juego
En un comunicado enviado a CRN.com, HPE asegura que mantiene un «diálogo permanente» con todos los accionistas y que examina de forma recurrente «la dirección estratégica y la creación de valor a largo plazo». De puertas afuera, la postura oficial de HPE subraya el historial probado de ejecución de la compañía y la apuesta por alinear su cartera con los grandes puntos de inflexión del mercado, desde la nube híbrida hasta la inteligencia artificial.

Efectivamente, Antonio Neri ha transformado HPE, históricamente un proveedor de hardware (servidores, almacenamiento y redes) para centros de datos empresariales, en un proveedor de servicios desde el edge a nube, con GreenLake (una plataforma de servicios de nube híbrida) como buque insignia. Además, acaba de acordar la compra de Juniper Networks por 14.000 millones de dólares para reforzar la propuesta de redes impulsadas por IA.
Entre 2018 y 2024, HP pasó de depender de la mera venta de hardware a obtener más de un 45 % de sus ingresos en contratos recurrentes ligados a software y servicios, según datos internos de la propia compañía. Esa transición, sin embargo, ha sido más lenta de lo que esperaban algunos inversores institucionales, que comparan su ritmo con el de otros gigantes de la nube.
El canal se moviliza en defensa de Antonio Neri
En pleno auge de la inteligencia artificial y con una transición a la nube híbrida que ya no admite marcha atrás, el pulso entre Elliott y la directiva de HPE marcará el corto plazo de la compañía. Si la junta decide respaldar a Neri, el fondo de inversión podría intensificar su campaña. Si opta por un relevo en la dirección, se abriría un nuevo capítulo para un gigante que factura más de 28.000 millones de dólares al año. Mientras tanto, clientes y socios de canal aguardan el desenlace con la vista puesta en la próxima reunión del consejo y en unas cuentas trimestrales que se publicarán a finales de mayo.