5G aportará 23.000 millones de euros al conjunto del sector TIC en España en 2026, gracias a la aplicación de esta tecnología para la digitalización de las industrias. Así se pone de manifiesto en un estudio realizado por Ericsson y la consultora Arthur D. Little. De acuerdo con el informe, 4.100 millones de euros procederían de conectividad, 11.500 de la parte de logística/gestión de esa conectividad; y 7.800 de aplicaciones. De este reparto, las operadoras tienen su gran negocio en la conectividad (89%), pero suspenden en aplicaciones, de ahí que tengan que recurrir a alianzas. Y no está el tema para dudar pues, según este análisis, a nivel mundial los ingresos de las telco registraron un crecimiento plano que, dándole la vuelta a la tortilla, podrían ver aumentar hasta el doble dígito con la incorporación de avances como IoT, Inteligencia Artificial, Big Data, Realidad Virtual… y 5G. Gracias a este último, el proveedor pronostica que las operadoras ganarían11.000 millones de euros en 2026.
Ya se ha hablado mucho de los beneficios de esta “quinta generación” como una mayor duración de la batería de los dispositivos (hasta 10 años), un incremento de la eficiencia espectral, mejor fiabilidad de la red, capacidad de posicionar a una persona u objeto de forma más precisa, velocidades pico de 20 Gbps, Network Slice…, pero quizás sea la latencia el argumento que más pese a la hora de dar el salto cualitativo y cuantitativo. No en vano, por mucho que las operadoras estiren el 4G agregándole portadoras para alcanzar velocidad, perderán eficiencia, señala Iván Rejón, director de estrategia, marketing y comunicación de Ericsson.
De esta manera, para sacarle todo el jugo a las nuevas redes hay que centrarse en casos de usos. “5G es un concepto realmente nuevo que supone una revolución e implica ir a mercados verticales, a casos de uso testados”, expone Iván Rejón, director de estrategia, marketing y comunicación de Ericsson (en la foto). “Y en España tenemos empresas muy punteras que nos va a permitir destacar en 5G en diferentes sectores”, añade. Por eso la multinacional ya está trabajando con la DGT, Acciona o Ifema.
Sin embargo, para que la nueva generación de redes móviles triunfe se antoja imprescindible la “coopetición” entre todos los players del mercado, en palabras del directivo. Y, por supuesto, el apoyo del Estado. Y es que, pese a estas buenas perspectivas de negocio, en nuestro país todavía no hay un plan gubernamental para potenciar su desarrollo, tal y como ha reconocido Iván Rejón. “Nos preocupa que en España no haya un plan sobre 5G cuando la Unión Europea lo está exigiendo a todos los Estados miembros”, denuncia. En opinión del directivo, España –con los operadores a la cabeza- han de ponerse las pilas para no quedarse atrás y para ello estima que tienen de fecha límite finales de 2017. En este tiempo habrá que marcar una hoja de ruta en la que se deberán figurar cuestiones como la subasta de espectro –algo que ya se está llevando a cabo en otros países- y los incentivos para impulsar actores o iniciativas clave en esta industria -como 5TONIC– o capacidades para crear vínculos con empresas. En definitiva, “una apuesta decidida por esta tecnología”, sentencia.
