Indra ha informado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores de sus previsiones para 2011. La primera firma española de tecnologías de la información espera un crecimiento de las ventas superior al 2%. Para conseguirlo, Indra se apoyará en su negocio exterior, toda vez que “los mercados internacionales están creciendo a tasas relevantes y el mercado nacional tendrá un comportamiento ligeramente negativo”. En concreto, el integrador abordará proyectos que le reportarán 2.557 millones de euros. Las ventas internacionales alcanzarán un 40% del total, creciendo al 10%, mientras que los proyectos en el mercado español le reportarán un 3% menos.
Por su parte, la contratación será algo superior a la del ejercicio precedente y apreciablemente mayor que las ventas establecidas para el año. La contratación se situará en 2.880 millones de euros, creciendo un 7% y superando el objetivo inicial del 5%. La contratación internacional alcanzará el 44% del total, creciendo un 23%; mientras que la contratación en el mercado doméstico descenderá un 3%.
Finalmente, Indra espera un margen EBIT (beneficios antes de impuestos e intereses) de al menos el 10,5% y rondará el 11%. De esta forma, Indra logrará mantener sus ganancias en un entorno parecido al de 2010, cuando llegó al 11,4%.
La nota enviada por Indra a la CNMV apostilla: “El cumplimiento de estos objetivos ha tenido lugar en unas condiciones de mercado de especial dificultad que, como la compañía anticipó al comienzo del ejercicio, han requerido actuaciones de adecuación de su estructura productiva, que han significado unos costes extraordinarios de 33 millones de euros. Con ello, el beneficio neto en 2010 ha resultado de 189 millones de euros. Sin considerar dichos gastos extraordinarios, el beneficio neto habría crecido más de un 10%“.