Aunque no ha sido, ni mucho menos, un tema importante en los mítines y en la prensa (se ha hablado mucho del futuro de las cajas de ahorro o de la lengua), el desarrollo de la sociedad de la información ocupa un capítulo importante en los programas con los que el Partido Socialista y del PP se han disputado el poder en Galicia.
El programa del PSOE
El Partido Socialista Gallego de Emilio Pérez Touriño, que ha gobernado en los últimos cuatro años, es más sucinto que el PP a la hora de hablar de sus planes tecnológicos, aunque, eso sí, da cifras de inversión concretas. Y es que presenta un Plan Estratégico para la Sociedad de la Información (PEGSI) que tiene una dotación de 800 millones de euros hasta 2010.
El resto es lo de siempre. El PSG habla de universalizar la banda ancha, fomentar el desarrollo de la TDT, implantar definitivamente la administración electrónica y permitir el acceso a las pymes y micropymes a las TIC.
Como nota distintiva, y en línea con otros gobiernos regionales en manos del PSOE, como Andalucía y Extremadura, también propone la adopción de software de código abierto por parte de las instituciones públicas gallegas.
En el ámbito del I+D+i, también se marca un objetivo cuantificable: que esta partida llegue al 2% del PIB de la región en el año 2013. Eso será gracias a la puesta en marcha de un programa quinquenal que culmina en 2015.
El programa del PP
Por su parte, el tratamiento de este tema en el programa del PP es más extenso, pero adolece de cifras concretas de inversión en este campo. El equipo de Alberto Núñez-Feijóo exhibe muy buenas (y aceptadas por todos) intenciones. Así, el partido conservador, de gobernar, fomentaría las TIC con el fin de impulsar la competitividad de las empresas y se esforzaría por seguir incorporando las nuevas tecnologías a la administración.
El PP reconoce que existe una “brecha digital” en la sociedad gallega y propone la creación de una red de telecentros para eliminarla. En este sentido, concibe las TIC como “instrumento de compensación territorial”. En el capítulo de las subvenciones, garantiza que habrá ayudas para la adquisición de equipos y la contratación de acceso a Internet tanto de particulares como de pymes. Asimismo, propone un mayor aprovechamiento de la informática y las comunicaciones por parte de las empresas del sector agropecuario, tan importante en la región.
En el ámbito de la investigación y el desarrollo industrial vinculado al sector tecnológico, el PP se mira en el espejo de regiones como Flandes, Baviera o la zona que rodea a Estocolmo. En definitiva, habla de la creación de “un entorno” propicio para atraer capital privado. Para lograrlo, señala que hay que reparar la conexión de la universidad con el tejido productivo.
