Cetelem acaba de hacer público los resultados del informe El Observador de la Distribución 2009. De acuerdo con este estudio, el 66% de los españoles han reducido su consumo, el 87% ha disminuido sus visitas a tiendas y centros comerciales y el 95% reconoce ponerse un tope en la cantidad destinada a la adquisición de bienes de consumo. Y es que, ahora se buscan productos más baratos (41%) y se compara más que antes (18%). En este último aspecto Internet se considera por el 81% de la población consultada como el mejor medio de información y para comparar precios. Asimismo, la financiación en el punto de venta empieza a ser un elemento determinante para el 67% de los clientes y el pago a plazos suscita interés en el 55%. Tan sólo un 27% solicita préstamos con plazos más largos y menores cuotas.
Ante este cambio de hábitos, ocasionado por la incidencia de la crisis en el bolsillo del ciudadano de a pie, los distribuidores españoles han puesto en marcha diversas estrategias para incentivar el consumo. Tales propuestas calan en el 35% de los ciudadanos, al igual que los folletos, cuya incidencia es mayor (55%).
Este informe se realizó a partir de una muestra de más de 1.800 individuos y expertos de la distribución de nuestro país.