El sector franquicias se ha convertido en los últimos años en uno de los sectores más importantes para el desarrollo de la economía española, al que corresponden 17 de cada 100 euros facturados en España. Este dinamismo ha situado al mercado de la franquicia en España como el quinto a nivel mundial en cuanto a facturación, número de insignias y establecimientos, y como el mercado de más rápido crecimiento en toda Europa (fuente: Tormo y Asociados).
No obstante, la ralentización en el crecimiento y el descenso del 66% en la apertura de nuevos establecimientos esperados para el 2009 muestran que el sector no es inmune a la crisis. Isabel Ballestero directora comercial del fabricante de ERP, Datisa, ha puesto de manifiesto que para que este sector supere la crisis con éxito, es necesaria una adecuada gestión de los recursos disponibles, para lo que las nuevas soluciones de gestión empresarial prestan un apoyo fundamental.
No obstante, la apuesta por estas soluciones no es del todo contundente en el sector, según los datos que maneja Datisa. “Más de la mitad de las cadenas de franquicias en España aplican hoy unos sistemas informáticos de gestión básicos, centrados exclusivamente en la gestión comercial y el control de caja, olvidando el control de otras múltiples áreas que impactan de manera significativa en su beneficio”, explica Isabel Ballestero.
Modelos informáticos y de gestión en la Franquicia
En las cadenas de franquicias, hoy en día, se observan tres principales modelos informáticos de gestión. En el primero de ellos, las soluciones de gestión residen en un servidor de la central, gestionado por el franquiciador y cada centro o franquicia accede a sus funcionalidades de forma remota y a través de Internet. Dicho modelo puede suponer un problema de disponibilidad para aquellas franquicias con picos de facturación, como una cadena de restaurantes o comercios, donde una caída de Internet impediría el acceso al sistema dificultando la operativa del negocio.
El segundo modelo informático de gestión, también muy extendido en el ámbito de la franquicia, es la instalación separada de un sistema de gestión en la central y en cada centro. Puede tratarse incluso de sistemas de gestión de diferentes proveedores, siempre que éstos estén bien comunicados entre sí. Dicho modelo supone una mayor inversión en TI para el franquiciado, pero ofrece también mayores garantías de disponibilidad y seguridad.
Según Ballestero, en los últimos años, está ganando cada vez más adeptos un modelo de informatización de franquicias mixto, donde la aplicación de gestión está instalada en un servidor central y en el que, sin embargo en caso de caída de la comunicación, cada centro cuenta con un sistema de seguridad que le permite trabajar con la aplicación en modo local. Se trata del modelo más costoso pero también el que mayores niveles de disponibilidad y seguridad ofrece hoy por hoy, garantizando a la vez un adecuado intercambio de información entre central y franquicias.
Planteamiento de futuro: gestión de la franquicia en su globalidad
Isabel Ballestero estima que para un adecuado control de sus recursos, una franquicia debe ser gestionada a través de un sistema de gestión global que permita un mejor control de los recursos y de la toma de decisiones. Las tareas en las que es necesario hacer especial hincapié según la directiva de Datisa y que son comúnmente olvidadas por muchas franquicias incluyen: Contabilidad Financiera, Contabilidad Analítica de Flujos de Gastos e Ingresos, Control Presupuestario, Declaraciones Fiscales, Tesorería, Control de Inmovilizados, Gestión de Centros Logísticos y Actividades de Transporte.