Todavía tres comunidades españolas: Madrid, Comunidad Valenciana y Murcia, no han llegado a un acuerdo para la implantación del plan Escuela 2.0 del Gobierno Central. Las tres autonomías gobernadas por el PP han perdido el presupuesto destinado para ellas en 2009 para equipar a los escolares de 5º de primaria y 2º de la ESO con portátiles y dotar a las aulas con pizarras digitales y conexión wifi a Internet. Según informa hoy el diario El País, se trata de más de 26 millones de euros -Madrid y Valencia, con 11,1 millones cada una, y Murcia, con 3,9- que el Gobierno acabó destinando a adecuar las instalaciones de todos los centros españoles.
Las razones esgrimidas por las tres comunidades reticentes a implantar el Plan del Gobierno -que estipula una aportación equivalente de las comunidades a la adjudicada por el Gobierno Central- tienen que ver con la falta de confianza en el modelo propuesto. Por ejemplo, se aduce que el presupuesto no es suficiente para financiar portátiles de cierta calidad, ni tampoco para su instalación y mantenimiento. Más revuelo causó la reacción de Valencia, cuando el pasado diciembre su consejero de Educación, Alejandro Font de Mora, se negó a repartir los 50.000 portátiles que les tocaban a sus alumnos porque “sus pequeñas pantallas podrían causarles miopía”.
Mientras tanto, el resto de comunidades ya han puesto en marcha sus respectivos planes, aunque algunas han incluido ciertas variaciones como la Rioja, que sólo llevará los portátiles a aquellos centros que lo soliciten. Cataluña también ha dividido el arranque del plan entre primaria y secundaria.