BQ es una de las compañías españolas revelación en los últimos años. La firma madrileña se bate el cobre en mercados complicados como el de los teléfonos o las tabletas, donde las economías de escala, la cobertura planetaria y el reconocimiento de marca son claves, y donde BQ compite con gigantes de la talla de Apple, Samsung, Lenovo o Huawei, que multiplican en algunos casos por cien su facturación. Volvemos a la historia de David contra Goliat.
CHANNEL PARTNER habló con Rodrigo del Prado, socio fundador y director general adjunto de BQ, para conocer la receta que le permite a la firma de la localidad madrileña de Las Rozas crecer y afianzarse entre gigantes, y también para saber de sus planes para los próximos meses. En 2014, BQ comercializó casi un millón y medio de dispositivos (entre teléfonos, tablets y lectores de libros), “en la línea de lo previsto”. Eso llevó a la compañía a obtener unos ingresos en el año de 202,5 millones de euros, un 76% más que en el ejercicio previo.
Además, este despegue de la facturación también tuvo su reflejo en la plantilla. Y es que BQ casi dobló su personal en ese intervalo, pasando de 579 a más de 1.000 profesionales contratados. “La plantilla aumentó notablemente en 2014 porque empezamos a controlar todas las partes del proceso de desarrollo de nuestros productos: diseño artístico y mecánico, desarrollo hardware y software. Además, abrimos mercado en Francia y Alemania. Esto supuso mucha más carga de trabajo”. Rodrigo del Prado asegura que la plantilla se ha estabilizado, aunque seguirá aumentando en cierta medida debido al comienzo de las operaciones en Italia, Suecia, Reino Unido y Rusia.
La revelación de las pasadas navidades
En 2014, salieron al mercado los primeros teléfonos y tablets “diseñados y desarrollados al cien por cien” por la compañía española. Pero el hito llegó en las pasadas navidades, cuando el Aquaris E5 HD, teléfono que había presentado en mayo, “fue el más vendido en el mercado libre”. Asimismo, Del Prado asegura que otros cuatro de sus terminales se situaron “entre los 10” más vendidos de la campaña comercial de finales de año. Como consecuencia, según sostiene Rodrigo, hoy en día BQ, que vende todo a través de un canal variopinto que va desde operadoras a tiendas de barrio, es la segunda marca más vendida en España en el mercado de libres, por detrás de Samsung.
“No podemos quejarnos”, reconoce el fundador de BQ, quien no concreta previsiones para este año, “por lo cambiante del mercado”, pero se muestra optimista para este curso. “Estamos en un momento de crecimiento y todo indica que el volumen de ventas será similar o incluso mejor que el de 2014”. Y es que BQ está a punto de lanzar su segunda familia de teléfonos diseñada y desarrollada enteramente por ellos: la Aquaris M. Además, acaba de sacar el segundo smartphone con Ubuntu, después de haber sido el primer fabricante en apostar por este sistema operativo en celulares.
¿Cuál es el secreto para que BQ haya podido meter la cabeza en un negocio de colosos mundiales? Del Prado asegura que todo pasa por “aportar un valor diferencial”, algo que sólo puede ocurrir si se detectan correctamente las carencias del mercado. En el caso de BQ, vieron que las operadoras estaban dejando de financiar los dispositivos móviles, por lo que el mercado libre estaba despuntando. En este contexto, Del Prado dice que había que ofrecer terminales a un precio “razonable” y con un buen servicio posventa.
