Según informa Europa Press, el comité de empresa de Sharp ha convocado huelga entre el 27 de noviembre y el 3 de diciembre para forzar a la empresa a negociar mejores condiciones para los 57 afectados por el expediente de regulación de empleo (ERE) presentado en el centro de Cornellà de Llobregat (Barcelona), lo que supone reducir la plantilla en un 59%.
El periodo de negociación del expediente acaba el 3 de diciembre, y hasta el momento no se ha alcanzado un acuerdo sobre las condiciones de indemnización para los despedidos. Según el comité de empresa, la compañía ha ofrecido una indemnización de 33 días por año trabajado con un máximo de 36 mensualidades, lo que los sindicatos consideran insuficiente, ya que tienen como referencia el ERE aplicado en 2011 en el centro de Sharp en Sant Cugat del Vallès (Barcelona), cuando se pagaron 45 días por año trabajado.
La multinacional japonesa vendió en 2011 sus instalaciones de Sant Cugat a Nortia –propiedad de Cirsa– y redimensionó su actividad para dedicarse exclusivamente a tareas comerciales y a I+D, lo que supuso el despido de 87 trabajadores y su traslado a Cornellá. Esta noticia coincide con la reciente decisión de la compañía de reforzar su presencia en el mercado europeo de sistemas de información, concretamente en las áreas de soluciones documentales y señalética digital. En cualquier caso, la compañía no ha desvelado sus planes en este terreno para cada una de las filiales.