Microsoft acabó su año fiscal por encima de las previsiones de los analistas y superó los resultados económicos del año anterior. El gigante de Redmond facturó 86.833 millones de dólares, un 12% más que en el periodo precedente. Un tirón favorecido por la integración de Nokia en el último periodo del año contable.
Pero donde más se notaron las ventas añadidas de Nokia fue en los resultados del último trimestre (de abril a junio). Las ventas en ese periodo pasaron de 19.114 millones de euros a 23.380 millones de dólares, lo que supone un crecimiento del 18%. Eso sí, la absorción de Nokia también ha diezmado los beneficios. Y es que el beneficio neto de Microsoft en el último trimestre fiscal, concluido el 30 de junio, cayó un 7%, pasando de 5.000 millones a 4.600 millones, o, en términos bursátiles, de 59 centavos por acción a 55.
Los costes totales de la mayor reestructuración de la compañía, que se va a llevar 18.000 puestos de trabajo (la mayoría de Nokia), serán en total 1.600 millones de dólares y afectarán a las cuentas de la firma durante los próximos años. Es una factura que Microsoft sólo ha empezado a pagar.
Por negocios, las ventas de Windows, Office y otros productos como SQL subieron un 10,5%, lo que significa un acelerón con respecto a trimestres precedentes. En licencias de servidor, la subida llegó al 14% en el cuarto trimestre.
Asimismo, la compañía ha reportado la venta de 5,8 millones de smartphones de Nokia (una cifra todavía alejada de los 35,2 millones de iPhones que movió Apple en su último trimestre fiscal). Incluso con las ventas añadidas de Lumia, Microsoft no llega hoy al 5% de cuota en el mercado mundial de smartphones. El negocio de telefonía contribuyó con 1.990 millones de dólares a la facturación total del año de la compañía que lidera Satya Nadella.
Mejor le está yendo a la compañía de Nadella en el ámbito del cloud. Así, los ingresos procedentes de Office 365 se doblaron con creces y las ventas totales de servicios en la nube (incluido Azure) también crecieron por encima del cien por cien. Los servicios cloud de Microsoft dirigidos a empresas ya suponen unos ingresos anuales de 4.400 millones de dólares. Un último apunte: la tableta Surface le proporcionó a Microsoft unos ingresos de 409 millones de euros en el último trimestre.
