Son muchas las compañias que a lo largo de estos días se están acogiendo a Expedientes de Regulación Temporal de Empleo con el fin de poder hacer frente a los gastos salariales y de mantenimiento de la operativa como consecuencia de la caída de los ingresos. Algunos de ellos también están afectando a empresas del sector de tecnologías de la información como Canon o Ricoh, que ya han notado esa pérdida de ingresos a raíz de la declaración de alarma y confinamiento de la población por el COVID-19.
El ERTE aprobado por Ricoh afectará a cerca de 1.000 empleados de la compañía, lo que representa menos de la mitad de la plantilla y se extenderá del 14 de abril hasta, como máximo, el 15 de julio de 2020. Como explican, fuentes de la compañía, la presentación del ERTE responde a causas productivas y organizativas derivadas de la crisis sanitaria, lo que obliga a adaptar la fuerza de trabajo al nivel actual de actividad laboral.
En virtud del acuerdo, la compañía garantizará un complemento sobre el salario bruto fijo mensual de hasta el 85% para aquellos empleados cuya retribución sea inferior a 25.000 euros anuales, y de hasta el 80% para aquellos con salarios superiores a 25.000 euros anuales. icoh España también se ha comprometido al mantenimiento de los puestos de trabajo tres meses después de la fecha de finalización del ERTE. En paralelo, la compañía está en al máximo los gastos no esenciales para impactar lo mínimo posible en los empleados.
“La presentación de este ERTE tiene como fin proteger a nuestros empleados y la continuidad del negocio a medio plazo, y permitir adecuar la capacidad productiva de la compañía a la súbita caída de la actividad que experimentamos”, explica Ramon Martin, CEO de Ricoh España y Portugal. “Somos conscientes del impacto que esto supondrá en nuestro día a día laboral y personal, pero estamos convencidos que esta difícil decisión es una respuesta necesaria para adaptarnos a la caída de la actividad, con el objetivo de estar en condiciones de recuperarla cuando se supere la crisis”.
En el caso del ERTE de Canon apenas ha trascendido más información salvo que está afectando a gran parte de su plantilla, incluido personal de la planta de Guadalix de la Sierra.