La mayor parte del canal de distribución desarrolla su actividad en las comunidades de Madrid y Cataluña. Como coinciden en afirmar diferentes fuentes del sector, casi un 70% de los partners concentran su negocio en ambas regiones y descuidan al resto de comunidades que, como revelan los datos facilitados por el Instituto Nacional de Estadística, representan enormes oportunidades de generar nuevo negocio. Y es que contrariamente a la creencia generalizada de que las dos grandes ciudades españolas generan el mayor porcentaje de riqueza, los estudios del INE desmienten ese punto radicalmente porque, aunque Madrid representa el 17,5% de la economía nacional y Cataluña el 18,3%, las que registraron mayor crecimiento real fueron Navarra, Galicia, Andalucía y el País Vasco [según datos correspondientes al ejercicio de 2004, el último analizado]. El crecimiento del PIB (Producto Interior Bruto) de todas estas comunidades ascendió a 3% mientras que la zona geográfica con menor dinamismo fue Baleares por segundo año consecutivo. No obstante, la lectura más interesante del análisis es evidenciar el peso relativo que mantienen otras regiones en la generación del conjunto de la riqueza nacional. Es el caso de la Comunidad Valenciana que ya representa el 9,6% sobre el total y de Andalucía con más del 13% del global. No obstante, también conviene matizar que la de Madrid es la región que más ha incrementado su participación relativa en el conjunto de la economía nacional, aproximadamente 0,7 puntos, hasta situarla en el 17,5%.
Aunque el crecimiento experimentado por todas estas economías estuvieron cimentados en el buen comportamiento de las ramas industriales, en el caso de Navarra y País Vasco, del turismo y la construcción (Andalucía, Valencia y Madrid), lo cierto es que el dinamismo de todas estas regiones revela la existencia de un tejido empresarial activo y necesitado de incorporar las últimas tecnologías a sus procesos de gestión. El excepcional caldo de cultivo que representa esta nueva savia regional está siendo desaprovechado por los partners y fabricantes de informática. Lo que no resulta obvio para muchos de ellos es que su futuro y posible supervivencia pasa irremediablemente por atacar estas nuevas cuentas (pymes mayoritariamente), que precisan de prescripción y asistencia inmediata en materia de tecnologías de la información. Pero, ¿por qué no es un objetivo prioritario para el partner de TI la empresa periférica? Habría que preguntarle a alguno de ellos aunque gran parte del problema proviene de los fabricantes, que concentran el mayor volumen de su actividad en los dos grandes ejes empresariales del país y desatienden el resto de regiones. Para Juan Larragueta, sales manager Iberia de SonicWall, un directivo con una amplia trayectoria y conocimiento del mercado español de TI, la concentración de grandes empresas en estas metrópolis es un hecho innegable que es difícil de cambiar. “España es así y el peso de ambas ciudades sobre el conjunto de la facturación del sector seguirá siendo predominante”. No obstante, también considera que en los últimos tiempos la toma de decisiones se está desplazando a la periferia por el peso que está ganando ayuntamientos y corporaciones locales.
Los datos de implantación de tecnologías de la información y comunicaciones en el conjunto del tejido empresarial español también avalan la teoría de las enormes oportunidades que todavía representan las provincias. Así, las empresas de Castilla La Mancha, Galicia y Extremadura son las que cuentan con menor porcentaje de uso de nuevas tecnologías frente a las compañías de Madrid, Cataluña y País Vasco, que se sitúan en el extremo contrario [Datos de la encuesta sobre el uso de TIC y comercio electrónico en las empresas del INE, año 2003]. En lo que se refiere al uso de tecnologías de la información y comunicación en los hogares los datos son todavía más diáfanos, como lo prueba que tanto Madrid como Cataluña, País Vasco y Navarra tengan el mayor equipamiento de ordenador en las viviendas, frente a Galicia, Castilla-La Mancha y Extremadura con exiguos porcentajes de penetración que no llegan al 40%. Lejos de estar saturados los mercados principales, que todavía tienen mucho trecho por crecer, lo que resulta aparatosamente evidente es que emerge la imperiosa necesidad de acometer nuevos proyectos en ciudades y localidades donde aún no ha llegado la informatización plena en el ámbito del hogar ni de la empresa. Como explica Juan Larragueta, una prueba del interés del resto de comunidades por conocer las últimas tecnologías es que en estos escenarios está garantizada una mayor concurrencia a los eventos organizados por los fabricantes. “En Mérida, Valencia, La Coruña, Gijón o Albacete tenemos una acogida inconmensurablemente mayor que en cualquier evento que organicemos en las dos grandes ciudades del país”.
¿Y cuáles son las áreas geográficas que demandan más tecnología? Pues cuanto más al sur y al oeste mayor déficit tecnológico y más necesidad de extender una labor de evangelización y concienciación previa a la propia comercialización de productos. “El enfoque del seminario que organizamos varía considerablemente si convocamos en una comunidad del sur o una del norte, y es que en las primeras todavía debemos detenernos en explicar aspectos básicos de seguridad que en otras regiones ya están superadas”, asegura al respecto Juan Larragueta. Sin embargo, este directivo es consciente de que todavía resulta muy difícil predicar con el ejemplo porque la realidad económica condiciona el reparto de la actividad por áreas geográficas. Así, la facturación de Sonicwall se distribuye entre Madrid (39%), Cataluña (32%), Valencia (11%), Andalucía (6%) y Castilla León (4%).
Mónica Hidalgo
Mónica Hidalgo es directora de la revista Channel Partner desde hace 25 años y tiene una amplia trayectoria como periodista especializada en el sector de tecnologías de la información con especial foco en el canal de distribución y los partners dedicados a la comercialización de servicios y productos de informática y comunicaciones