Infinity System ha elegido la vía de la energía solar para diversificar su negocio. El fabricante nacional de informática ha creado una nueva división que se encargará de instalar, por un lado, parques solares para producir energía y, por otro, producirá paneles para viviendas, según el diario económico Cinco Días. Y es que los responsables de Infinity han visto un filón en la obligación que a partir de este mes tienen todos los constructores de instalar placas fotovoltaicas en los edificios de nueva construcción. En declaraciones a este medio económico, Jorge Dot, director de Negocio Internacional de la compañía, explica que el fabricante ya cuenta con la homologación de los elementos que compondrán su oferta para viviendas. Además, la compañía se apoyará en sus tiendas Airis con el fin de promocionar el nuevo negocio, con el que pretende alcanzar una cuota de mercado de entre un 10% y un 20% en un mercado que podría llegar a los 1.000 millones de euros.
La otra actividad a la que piensa dedicarse la compañía es la solar fotovoltaica, puesto que el fabricante español está terminando la instalación de una planta de producción propia de 100 kilovatios en su fábrica de Guadalajara. Con ella prevé poner en marcha un huerto solar de un megavatio entre octubre y noviembre, todo depende de los trámites con la administración. El negocio en este segmento también es goloso, puesto que las empresas distribuidoras de energía están obligadas a comprar la electricidad que producen las centrales solares y pagan unos 0,44 euros por cada kilovatio. Según Jorge Dot, por cada megavatio vendido se consigue un ingreso de ocho millones de euros a precio de mercado, con una rentabilidad anual del 8% al 10%. Por último, Infinity tiene previsto lanzar para finales de año al mercado su propio equipo seguidor del movimiento solar con el que pretende aprovechar mejor la energía solar.