Por Juan Cabrera (Mónaco) El mayorista barcelonés Kinyoha salvado 2011. Rafael Cortés, business manager de la firma (en la foto), adelanta que el pasado año la firma cerró con una facturación que rondó los 24 millones de euros, en línea con los ingresos del año precedente.
Kinyo aprovechó el cierre de DAT Informática a mediados de año para fichar a un comercial volcado en el negocio de las promociones y el canal electro. “Estamos trabajando más el sector de los bancos y las cadenas de electrodomésticos, y ahí es donde queremos crecer este año”, asegura Cortés, que reconoce que las ventas a las tiendas informáticas han caído por el cierre de muchos de estos establecimientos. “Muchos propietarios que han tenido que cerrar se han ido a casa y se han convertido en autónomos que venden y dan servicios a empresas. Mantener hoy en día una tienda, con sus alquileres, sueldos y gastos fijos, se ha hecho muy complicado para muchos”, explica el responsable de negocio de Kinyo.
Kinyo también firmó el año pasado con Asus, una marca que llevaba DAT, y ahora trabaja con Promocaixa, el brazo de La Caixa dedicado a la promoción de todo tipo de productos, no solo tecnológicos.
Kinyo, que tiene casi 40 empleados y una oficina comercial en Madrid, ha visto como la morosidad se ha incrementado en los últimos tiempos. “Es un tema que tenemos controlado, pero que nos afecta. Además, a muchos clientes también les han quitado el riesgo [las aseguradoras protegen un porcentaje menor de la operación o no la aseguran en absoluto]”. Sin embargo, para Cortés, el mayor problema ahora mismo está en la pasividad del mercado. “Los distribuidores no se aventuran a vender cosas nuevas. Además, se compra por goteo. Nadie quiere tomar riesgos, aunque tengas una buena tecnología que ofrecerles”.
Además de Asus, Kinyo ofrece productos de consumo de más de media docena de fabricantes entre los que se encuentran Acer, HP, Lenovo, Samsung, Sony, TomTom, Kingston, Logitech o Panda.
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