Las altas temperaturas pueden hacer que el router funcione peor. Es una realidad que el clima afecta a la velocidad del wifi y eso en verano se puede notar. El calor afecta a los componentes que están diseñados para funcionar, de forma óptima, en un rango de temperatura determinado.
“Puede ocurrir que simplemente notes una pérdida de velocidad y de rendimiento, incluso puede ser casi imperceptible, pero también podría ocurrir que notes cortes continuos o que te quedes sin conexión de vez en cuando y tengas que apagar el aparato. Además, los componentes pueden sufrir por el calor y eso hace que la vida útil se acorte”, comentan desde Anovo, compañía de servicio postventa en tecnología.
Hay tres causas princiapales para una mala conexión wifi en el hogar durante el verano:
-Problema de alcance. Puede que el router no se encuentre adecuadamente situado en el alojamiento vacacional. Lo ideal es colocarlo en algún lugar céntrico y un poco elevado, como una mesa o un armario. No debe estar bloqueado por objetos situados enfrente o al lado y, si tiene antenas externas, pueden orientarse hacia diferentes ángulos o hacia donde haya más necesidad de conexión. El uso de un repetidor wifi puede ser muy útil para hacer llegar la señal a todas las estancias de la casa.
-Router cerca de electrodomésticos. Es un error ponerlo cerca de la televisión o encima de la consola, por ejemplo. Estos aparatos van a desprender calor y eso va a hacer que se sobrecaliente más, con lo que ello conlleva.
-Situarlo cerca de las ventanas. Eso provoca que el aparato se sobrecaliente en exceso y sufran los componentes. “Es importante que esté lo más lejos posible de estas fuentes de calor que pueden afectar especialmente en los meses de verano, cuando la temperatura es mayor”, señalan desde Anovo.
Cómo disfrutar de buena conexión
Dependiendo de cuál sea nuestro destino vacacional, podemos encontrarnos con dificultades a la hora de conectarnos a Internet. Por ello, desde Anovo nos dan una serie de consejos para ponerle solución y que una mala conexión no nos arruine las vacaciones:
-Router 4G o 5G portátil. De esta forma vamos a poder tener conexión a Internet en cualquier lugar donde haya cobertura móvil. Además, este tipo de dispositivos suelen tener incorporada una batería que permite utilizarlo durante horas sin necesidad de conectarlo a la red eléctrica. Un router portátil funciona de forma muy sencilla. Básicamente, lo que se necesita es una tarjeta SIM compatible y tener cobertura de red. A partir de ahí, el dispositivo ofrecerá conexión como si estuviéramos en casa. Lógicamente, la velocidad dependerá de la calidad de la conexión. Si vamos a viajar a un país extranjero, algo muy interesante es comprar una SIM en el destino. De esta forma podremos conectarnos a las redes locales de una manera económica.
-Dongles USB. Son dispositivos pequeños que se conectan al puerto USB del ordenador y que permiten tener internet. A diferencia de los routers 4G, no tienen problema de autonomía, ya que se conectan directamente al portátil. También son más económicos. Igualmente, es necesario tener una tarjeta SIM. Una pega de este sistema es que, generalmente, solo ofrece internet al dispositivo en el que está conectado.
–Realizar tethering y compartir Internet desde tu smartphone con otros equipos, ya sea un portátil o tablet, al mismo tiempo. De esta manera, el smartphone actúa como modem o modem-router para dar conectividad a otros dispositivos. Es una opción económica y sencilla. Sin embargo, uno de sus inconvenientes es que consume mucha batería del móvil.